La serie documental de Netflix ofrece un recorrido cronológico sobre hecho reciente, con precisión en la suma de testimonios aunque no suma nada nuevo a lo conocido.
Esta producción documental utiliza el molde del thriller paranoico para reflexionar sobre los eventos que generan obsesiones que son muy difíciles de abandonar.
Esta serie de misterio dialoga con las estructuras narrativas típicas de Agatha Christie, pero también con el mundo de Sherlock Holmes, en un relato desparejo, pero interesante.
Este thriller psicológico se cruza con un alegato contra la Iglesia Católica en Irlanda, en un relato con múltiples capas que irá mostrando sus cartas lentamente.
La nueva serie de Donald Glover retuerce por completo el concepto del film original y va a contramano de las expectativas, en un relato que fusiona géneros y tonalidades.
Esta miniserie con Brie Larson acierta cuando abraza a su protagonista en todas sus contradicciones, pero se deja seducir un poco por las formas subrayadas de la discursividad actual.
A partir de la icónica serie sobre médicos, la autora reflexiona sobre los problemas de ayer y los problemas que hoy, algunos de ellos que parecían resueltos.
Esta producción centrada en la figura del popular cantante británico hace una apuesta por ir a fondo con aspectos personales del artista, por lo que extrañamos un poco las canciones.
La serie basada en el personaje literario creado por Lee Child dialoga con la acción y el policial de los ochenta, y a pesar de sus desniveles narrativos, consigue ser bastante efectiva.