La creación de Alex Gansa y Howard Gordon, aún con sus desniveles, supo conservar su legado, principalmente a través de dos grandes personajes como fueron Carrie Mathison y Saul Berenson.
La serie arribó a un cierre más que digno, que a pesar de algunos desniveles y baches sueltos mantuvo la coherencia de los personajes.
Un gran episodio, que deja todo en un nivel de máxima tensión y con la serie ante la chance concreta de completar su recorrido de la mejor manera.
Un episodio de creciente angustia, donde cada decisión o acción va conduciendo a los distintos protagonistas a situaciones que bordean la desesperación.
La serie recupera bastante de su ritmo acelerado, en un episodio desparejo pero más atractivo que los dos previos.
La meseta creativa de la serie continúa en este episodio, que solo tiene unos pasajes realmente atractivos aunque entregue una muerte realmente impactante.
La última temporada de la serie encuentra una meseta en este episodio, donde las distintas tramas y conflictos entran encuentran barreras para progresar adecuadamente.
Un episodio con un ritmo algo más pausado pero que igual siguió acumulando distintos giros, hasta colocar a Carrie en un territorio inexplorado e imprevisible.
Los últimos seis episodios de la serie de espías se verán todos los lunes a las 23:55. La segunda parte de la cuarta temporada del drama familiar se emitirá todos los miércoles a las 23:00.
La serie entrega acá uno de sus mejores episodios, con una narración vibrante, que arrastra por completo al espectador, conduciéndolo a una incertidumbre total.
