Esta serie policial es una de las joyas ocultas de la televisión norteamericana de los noventa y el primer gran papel del recientemente fallecido Andre Braugher, en una interpretación espléndida.
Con sus desniveles, la serie alcanzó un cierre decente, que resuelve múltiples conflictos con bastante fluidez y entrega un plano final casi perfecto, que se impone a cuestionamientos un tanto excesivos.
La serie empieza a acomodar todas las piezas narrativas y deja varios interrogantes abiertos de cara al final de temporada, aunque también hace varios sacrificios en el camino.
La tercera temporada parece reacomodarse y encontrar un nuevo conflicto central a partir de los giros que introduce este capítulo que, sin descollar, fluye sin problemas.
La serie de Vince Gilligan y Peter Gould sigue en un nivel altísimo. El episodio de esta semana tranquilamente podría haber sido el final de la historia.
La serie de Vince Gilligan vuelve a dejar la vara muy alta, con un episodio notable cargado de tensión. Y con la despedida de uno de sus personajes más destacados.
El episodio de esta semana fue aparentemente de relleno, pero en verdad ofreció avances importantes y dejó la expectativa para el episodio previo al cierre de esta primera parte.