Una película que podría ser entretenida y estimulante a partir de su combinación de géneros, pero que está hecha con una llamativa falta de ganas y energía.
El nuevo film del finlandés Jalmari Helander ratifica el amor del realizador por el cine de género, aunque todavía no logra configurar relatos totalmente sólidos.
Una película que pareciera no tener en cuenta lo que se hizo en el cine de superhéroes de las últimas décadas, aunque eso paradójicamente le juega a favor.
Una secuela que intenta potenciar la amenaza de su predecesora, pero que cae en redundancias y repeticiones innecesarias, que la terminan volviendo irrelevante.
Esta nueva adaptación de la novela de Erich Maria Remarque tiene algunos pasajes inspirados, aunque le cuesta aportar elementos originales al clásico relato antibelicista.
El nuevo film de Roland Emmerich lo muestra alejado de su mejor nivel, aunque todavía capaz de conseguir algunas imágenes impactantes y abrazar con fervor el ridículo.
Se trata del máximo galardón otorgado en la competencia del festival. El film es una coproducción entre Argentina, Paraguay, Alemania, Países Bajos, Francia, Estados Unidos y México.
La nueva película de James Wan pretende combinar toda clase de referencias genéricas al cine de terror para delinear algo nuevo, pero es un objeto que nunca llega a cobrar vida propia.