Buena
Macbeth ya no duerme…
Por Mariana Jaqueline Ramirez
Ingresando a la sala del Teatro del Abasto, el espectador ya queda impactado por la ambientación: una leve bruma que cubre todo, del cielorraso cuelgan bolsas, una música que provoca una sensación tenebrosa, y para completar el cuadro están ellas, las brujas-novias ensangrentadas; uno de los elementos más destacados de esta puesta; que con movimientos lentos y robóticos dan la bienvenida a este sueño aterrador. Todo está expuesto en un ambiente nauseabundo del que resulta difícil escapar y que convierte al espacio escénico en una especie de cementerio del terror.
Esta nueva versión de la tragedia shakesperiana titulada El asesino del sueño (Macbeth) se estrenó el pasado 4 de agosto de este año. La dirección está a cargo de Facundo Ramírez, un artista con una amplia formación, que en esa oportunidad no sólo se ocupa del libro, la adaptación y la puesta en escena, sino que también interpreta a Macbeth.
Escrita hace más de cuatrocientos años, Macbeth es una de las obras de Shakespeare que más se ha llevado a escena y de la que más versiones se han hecho. Haciendo un poco de memoria, Macbeth es el general del ejército de Duncan, el rey de Escocia, asesinado por el mismísimo Macbeth en complicidad con su esposa, Lady Macbeth, personaje que en esta versión es interpretado fabulosamente por la actriz Antonia De Michelis. Si bien Macbeth se apodera de la corona de Escocia, se verá perseguido por el fantasma de Banquo, uno de sus amigos a quien ha mandado a matar junto a su hijo Fleance, aunque este último logra escapar.
Las profecías de las ensangrentadas brujas-novias que atormentan a Macbeth se irán cumpliendo. Aquí se encuentra la clave del título de la versión de Ramírez, que es la esencia que recorre la obra y le permite ir marcando el aspecto pesadillesco al que se suman la iluminación y la música incidental. La combinación de estos dos elementos provoca un efecto casi cinematográfico que se refuerza con las dos grandes compuertas que se ubican en el fondo del escenario: se abren y cierran para mostrar escenas que exponen mucha frontalidad y quietud en los cuerpos de los personajes; y, al mismo tiempo, permiten jugar con el adentro y el afuera del palacio, dándole un uso total al espacio.
La interpretación de Ramírez está muy lograda, demuestra un personaje humanizado y noble que luego por su ambición rompe el orden natural impuesto por Dios y provoca un desorden caótico alterando a todos los que lo rodean. En cuanto al vestuario de los hombres, es llamativo porque visten como si fueran soldados de un ejércitos actuales, con camuflaje de bosque o Woorland (mezcla marrón y verde), borceguíes y armas, y en algún que otro caso con la cara manchada de negro.
La obra concluye recuperando la armonía perdida, como no podría ser de otra forma tratándose de Shakespeare, con mucho “ensangrentamiento” y muertes en escena. Si bien la adaptación de Ramírez conserva a nivel textual la impronta shakesperiana, por momentos resulta abrumadora. Sin embargo esta situación se compensa con el tipo de puesta elegido, en sintonía con el contexto actual. Es preciso destacar la labor del director y del numeroso elenco de la obra, que tienen el mérito de llevar adelante una pieza de difícil realización, modernizándola pero sin perder la esencia de su autor.
Intérpretes: Bibiana Aflalo, Patricia Becker, Mateo Chiarino, Antonia De Michelis, Zuleika Esnal, Alejandro Falchini, Pablo Finamore,Agatha Fresco, Matías Garnica, Román Ghilotti, Diego Grueiro, Luciano Linardi, Mario Mahler, Joaquín Mesías, Jorge Noguera, Facundo Ramírez, Facundo Vidal, Manuel Vignau Realización de escenografía: José Luis Oms, Cecilia Podestá, Corina Renoldi, Patricia Reye, Lautaro Yepes Diseño de escenografía: Facundo Ramírez Realización de vestuario: María Renzo Diseño de luces: Roberto Traferri Maquillaje: Fernando Castillos Rodríguez Pelucas: El Mundo De Las Pelucas Máscaras: Bibiana Aflalo Escenografía: Bibiana Aflalo Diseño gráfica y fotografía: Pablo Pamucio Asistencia de dirección: Diego Grueiro Prensa: OCTAVIA Gestión Cultural y Comunicación Producción ejecutiva: Darío Martínez Producción: Facundo Ramírez Colaboración artística: Román Ghilotti Traducción, adaptación, versión y puesta en escena: Facundo Ramírez Dirección de actores: Román Ghilotti, Facundo Ramírez Sala: Teatro Del Abasto (Humahuaca 3549 – CABA) – Martes a las 20:30.
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