El film está ambientada en el mundillo de Hollywood en los años 30’s. Kristen Stewart, Jesse Eisenberg, Blake Lively y Steve Carell son sus protagonistas.
En el camino algo zigzagueante de su última etapa, Woody Allen encuentra aquí personajes y la mezcla de elementos justa como para recuperar la vitalidad perdida.
El actor de Duro de matar tuvo que bajarse en pleno rodaje y hay distintas versiones de por qué lo hizo. Se está filmando en Los Ángeles y continuará en Nueva York.
También se exhibió en la competencia Son of Saul, ópera prima del húngaro Laszlo Nemes. Además, se vio Lobster, nuevo film del griego Yorgos Lanthimos, protagonizado por Colin Farrell.