Una comedia romántica que no es tal, porque en verdad no es más que un retrato complaciente de sectores que dicen ser orientales pero son plenamente occidentales.
La ópera prima del hijo de Ridley Scott es una particular relectura de la saga Alien y el mito de Frankenstein, que aún con sus baches no deja de poseer elementos de interés.
Jason Statham retoma uno de sus personajes más duros en una secuela donde lo que más brilla son las coreografías de acción y la autoconsciencia de los clichés del género.
La continuación de El tigre y el dragón producida por Netflix es una buena película de acción y aventuras, pero que carece del romanticismo y la nostalgia del original.
El film es protagonizado por Michelle Yeoh y Donnie Yen, bajo la dirección de Yuen Wo-Ping. Se podrá ver por Netflix a partir del 26 de febrero del 2016.