Por Mex Faliero
NdR: Este texto contiene spoilers.
En el cuarto episodio, Only murders in the building parece haber dejado atrás las dudas de los primeros dos capítulos de esta segunda temporada. La duda que persiste es para qué se abrieron aquellas puertas que todavía no se insinuaron más allá del esbozo, como el personaje de Cara Delevigne, aunque intuimos que por el misterio que la rodea tendrá algún tipo de injerencia en la trama central. En verdad Here’s looking at you, dirigido por Jude Weng, sí abrió una nueva puerta, que es la aparición de Lucy (Zoe Colletti), la hija de una importante ex pareja de Charles (Steve Martin). Lucy tiene un vínculo paternal con Charles y su presencia motoriza algunos dilemas internos del protagonista, aunque lo interesante es el descubrimiento que hizo la chica: un pasadizo interno del edificio, que conecta y permite ver lo que pasa en cada departamento, otorgándole un toque siniestro a la historia. Pero, todavía más, Lucy vio al asesino de Buddy, aunque él -enmascarado- no la vio a ella, lo que la coloca en un lugar de testigo preferencial. Here’s looking at you también profundizó en la química lograda entre Charles, Oliver (Martin Short) y Mabel (Selena Gomez), el punto fuerte de la serie, especialmente con todo lo que despertó la aparición del arma homicida en el departamento del primero o con la asistencia en el parto a Nina Lin (Christine Ko), la nueva presidente del consorcio que parece no ser finalmente la asesina. Y nos trajo de vuelta a algunos personajes, como Teddy Dimas (notable Nathan Lane en la escena del ascensor) y su hijo Theo (James Caverly), quienes protagonizaron una discusión dolorosa (¿o tal vez, sabiéndose espiados, estaban montando una puesta en escena?). Pero más interesante aún, regresó Jan (Amy Ryan), a quien Charles va a visitar a la cárcel para que le brinde alguna ayuda en la búsqueda del asesino o, tal vez, porque la aparición de Lucy le devolvió la necesidad de recuperar a su más reciente -y psicópata- amor. Con su consabida mezcla de comedia y misterio, más la habilidad evidente para enroscar la trama, Only murders in the building nos mantuvo alertas en la semana en que se confirmó la tercera temporada.
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