No estás en la home
Funcinema

Recapitulación de Better call Saul: Something stupid

Por Rodrigo Seijas

(@funcinemamdq)

Atención: se revelan detalles del capítulo

Ya la notable secuencia de arranque marca la pauta de las tonalidades entre irónicas, melancólicas y hasta definitivamente tristes que atraviesan a este episodio de Better call Saul. Se escucha Something stupid, de Frank Sinatra, y la pantalla dividida que muestra las respectivas rutinas de Jimmy y Kim funciona inicialmente para mostrar los puntos de conexión entre ambos, pero luego va decantando en una narración tan sutil como desoladora de la separación que se va dando en los hechos entre ambos. Ahí la serie vuelve a evidenciar su enorme capacidad para narrar a través de las imágenes y la música, sin necesidad de remarcaciones discursivas, mostrando de paso que las causas de las crisis en las parejas pueden encontrarse no tanto en lo compartido sino en lo que no se comparte. La sabiduría de esta secuencia recuerda al notable segmento mudo de Up – Una aventura de altura, y eso es decir.

Si el arranque muestra la incidencia del tiempo en la relación entre Jimmy y Kim, algo similar se da con el resto de los personajes: la operación que está llevando Mike con los trabajadores alemanes ya lleva unos cuantos meses, aunque el objetivo final de construir el laboratorio parece aún lejano y las dificultades arrecian; mientras Héctor muestra una lenta pero constante recuperación luego de estar al borde la muerte, pero claro, ahí está Gustavo Fring para controlar que nada se salga de cauce y se recobre más rápido. De paso, la serie otorga otro guiño a los acontecimientos posteriores de Breaking bad: Fring le cocina a la doctora paila marina, el mismo plato que luego le cocinará también a Walter White y Jesse Pinkman en los capítulos Abiquiú y Bug, respectivamente.

Pero el gran foco de Something stupid terminó siendo un acontecimiento inicialmente trivial pero que luego adquiere distintas connotaciones. Jimmy ya tiene tan aceitado su negocio de venta de celulares descartables que hasta se permite hacer planes a futuro -que involucran montar un nuevo estudio de abogados- e incluso ponerse a discutir con un policía (algo definitivamente muy estúpido). Allí aparece Huell, malinterpretando un poco su función de guardaespaldas y golpeando al oficial, para terminar con una causa abierta que amenaza llevarlo a la cárcel por un tiempo largo. Y eso lleva a que casi irremediablemente Jimmy deba pedirle ayuda a Kim, justo después de que la hizo quedar bastante mal en una fiesta del estudio donde ella trabaja, en una secuencia marcada por la incomodidad.

Las acciones de Kim, un tanto enojada con Jimmy por haberle ocultado su nueva fuente de ingresos pero sumamente activa a la hora de montar una defensa para Huell, muestran las contradicciones que la atraviesan: será una excelente profesional y tendrá una vara moral alta, pero sigue amando a Jimmy y es capaz de muchas cosas para arreglar sus entuertos. El cierre de Something stupid es abrupto y deja flotando muchas preguntas: ¿cuál es el plan de Kim para salvar a Huell? ¿Qué hará Jimmy? ¿Cómo afectará todo esto a la relación que ambos mantienen? Lo que es claro es que esta cuarta temporada de Better call Saul ha sido hasta el momento, principalmente, sobre esta pareja luchando por su supervivencia afectiva.

Comentarios

comentarios

Comments are closed.