Por Rodrigo Seijas
ATENCIÓN: SPOILERS
Homeland continúa caminando al borde de la cornisa, con vueltas de tuerca que desafían constantemente la credibilidad y verosimilitud, pero sin salirse del eje por completo. Useful idiot es un episodio de ritmo persistente y vertiginoso, como un tren bala que no frena, o que quizás frene recién en los capítulos siguientes.
Hay varias líneas narrativas paralelas y entrecruzadas, una de las cuales es protagonizada por Saul, que va de un lado para otra tratando de sacar las papas del fuego. Primero gestionando una reunión con el Senador Paley que, hay que reconocerlo, resulta ser sumamente divertida, por cómo el escepticismo del legislador frente a las noticias que le transmiten Wellington y Saul, va transformándose en incredulidad al quedar en evidencia el alcance de la conspiración rusa y que él mismo tiene un rol dentro la trama del cual no estaba enterado. Más aún cuando se entera del nombre clave con el cual lo designaban los rusos: “idiota útil”. La soberbia de Paley se cae como un castillo de naipes, pero al menos termina teniendo una funcionalidad porque se pliega a la contención del escándalo desatado por la desaparición de Simone.
Lo segundo a lo que está atento Saul es a tratar de obtener el testimonio de Dante, lo cual Carrie finalmente consigue, obteniendo también la chance de desbaratar la red de espionaje que tenía Gromov en Estados Unidos. Allí es donde Useful idiot aprovecha la vertiente histérica y el pánico como motor: los agentes de Gromov caen en la trampa y el episodio le dedica varios minutos al agente ruso, mostrando lo que puede pasar cuando a un tipo se le cae el trabajo de su vida en cuestión de horas. La operación montada por Saul y Carrie, aún con sus riesgos y apuros en la ejecución, empieza a tener un éxito contundente. Sin embargo, aún acorralado, Gromov tiene recursos y métodos para intentar perpetuarse en el juego del espionaje y el contraespionaje.
Las herramientas con la que cuenta Gromov son su audacia, que le permite armar un plan de la nada para entrar al hospital donde está internado Dante –que incluye balear a un hombre propio-, y su palabra, que le sirve para poner en duda la honestidad de Carrie cuando queda frente al que ha pasado a ser un ex agente. “Yo no enveneno a mi gente”, le dice Gromov a Dante, para luego desafiarlo a que llame a Carrie, para escucharla y tratar de detectar si ella le mintió y es la verdadera culpable de su envenenamiento. Y claro, Carrie lo es, y no solo porque efectivamente envenenó a Dante, sino también porque se la pasado mintiendo durante toda su vida.
Useful idiot es también el episodio donde Carrie parece alcanzar su propio piso personal, primero enterándose de que su hermana va decididamente por la custodia de su hija; luego tratando de sacar a Franny de la escuela con artimañas desesperadas; después quedando expuesta con Dante (que sin embargo tiene un último gesto resignado y autodestructivo de delatar la presencia de Gromov en su cuarto); seguida de una carrera desesperada en la que casi atropella a su propia hija (en una maniobra casi canallesca por parte de la narración); y culminando con su estallido mental, en el cual se acumulan todas las imágenes horrorosas de su memoria. Revivimos la ejecución de Brody, el asesinato de Ibrahim, la muerte de Quinn, la alucinación de Franny ensagrentada…y claro, a Carrie mirando su propio reflejo, símbolo patente de la culpa que tiene acumulada. Useful idiot es un capítulo bipolar, manipulador, histérico, casi inimputable, como Carrie. Difícil saber cuán bueno o malo es eso.