Una película de Irán y otra de México ganaron las principales competencias del 17° Festival Internacional de Cine de Derechos Humanos, que culminó hace unos días en Capital Federal.
El jurado de la Competencia de Largometrajes Internacionales eligió a la iraní Lantouri de Reza Dormishian. “Partiendo del carácter universal de los derechos humanos, reconocemos un thriller creativo, multifacético, que combina múltiples géneros y aborda diferentes temas propios de la agenda de derechos humanos”, fue la explicación.
Además hubo una mención especial para Vivir y otras ficciones de Jo Sol, representando a España.
Por su parte la Competencia de Documentales Latinoamericanos presentó como ganadora a la mexicana Tempestad de Tatiana Huenzo. “La película representa la vulneración de todos los derechos humanos. La directora sintetiza, a través de dos historias en paralelo, la violencia de la desaparición forzada y de la corrupción total de las instituciones democráticas, en convivencia con organizaciones criminales y clandestinas”, explicó el jurado.
Sobre las menciones, hubo una primera para Los sentidos de Marcelo Burd (Argentina) y una segunda para Venían a buscarme de Alvaro de la Barra (Chile).
En otros premios, hay que mencionar que la Competencia de Cortos y Mediometrajes Internacionales el primer premio fue para Beti Bezperako Koplak de Begoña Vicario (España), y hubo menciones para Valparaiso de Carlo Sironi (Italia) y una segunda para Hombre eléctrico de Alvaro Muñoz Rodríguez (Chile).
El Premio RAFMA fue para Murciélagos de Felipe Ramírez Vilches (Argentina) y SIGNIS reconoció entre los cortos internacionales a Palabras de caramelo de Juan Amador (España) y en documentales latinoamericanos Los ofendidos de Marcela Zamora (El Salvador).