Por Mex Faliero
The night of es una serie de procedimientos, un subgénero habitual en la televisión y el cine norteamericano, que centra su mirada en los vericuetos de sistemas que fundan las instituciones. Los hay judiciales, los hay policiales, los hay penitenciarios. The night of los es todos: a partir del crimen de una chica y las sospechas que recaen sobre el joven Nasir Khan, la serie echa una mirada a los movimientos que policías, abogados, fiscales, jueces, guardiacárles y demás realizan ayudando a edificar ese telón de fondo que la serie nunca olvida, y que es la sociedad. Porque si The night of sobresale es porque ante todo este aparato técnico que ausculta con singular dilección (el primer capítulo y el último son dos maquinarias de la perfección narrativa), lo que la hace más interesante y fuerte es el componente humano de esas criaturas que terminan modificándose necesariamente a partir de lo que aquellas instituciones hacen con ellos. Esta serie es una remake de la británica Criminal justice, adaptada para HBO por Steven Zaillian y Richard Price, dos nombres claves para entender el perfecto funcionamiento: Price es uno de los autores involucrados en The wire, una serie que tiene similitudes con esta; Zaillian es una guionista y director muy interesante, con films fascinantes como Una acción civil, pero fundamentalmente autor del guión de La lista de Schindler, que amén de los personalismos emocionales y un poco ramplones de Steven Spielberg, tiene una de las miradas más atractivas sobre el nazismo, porque los ataca por un flanco inhabitual: lo administrativo, lo económico de su acción. The night of se sostiene sobre la base de dos guionistas en la cima creativa, y un elenco impecable donde sobresalen John Turturro como el abogado picapleitos Stone que se encuentra ante un caso que lo supera, Riz Ahmed como el sospechoso con un arco dramático impresionante que lo lleva de pelele a sórdido presidiario, y Bill Camp como el agente policial Box al borde del retiro, obsesivo y profesional hasta donde puede -y las emociones no lo confundan-. Es en este personaje donde se deposita el peso simbólico de la serie: Box, de todos ellos, representa el sistema (se podría decir que Stone es la autoconsciencia del sistema, y Nasir las consecuencia del mismo), de hecho es un sistema en sí mismo, con su mecánica búsqueda de “la verdad” y sus fallas inevitables. The night of es una serie reptil, que amaga constantemente a ir para diversos lados, pero sagazmente nunca se define, y nos lleva de la nariz sobre la base de un whodunit que al fin de cuentas no importa demasiado. Y en ese viaje fascinante, nos pasea por múltiples estructuras policiales, judiciales, penitenciarias para revelarnos al final que el verdadero viaje es el de los personajes (el de nosotros, los ciudadanos), un viaje de ida y sin vuelta atrás, como el melancólico desenlace de Nasir, el círculo vicioso de Box, el abandono al “qué dirán” de Stone o el destino indefinido de ese gato encerrado que es la gran metáfora de una serie perfecta por donde se la mire.