Por Javier Luzi
Entre el 18 y el 20 de junio se realizó la 38ª edición de las Jornadas Argentinas e Internacionales de Cine y Video Independiente, más conocidas como UNCIPAR, estrenando nueva sede. Ante la postergación que luego se volvió casi abandono por parte de Villa Gesell, el Municipio de Pinamar decidió aceptar el convite y convertirse en el lugar de citación para el Festival más antiguo del país y ya un clásico reconocido por los cortometrajistas que apuntan a mostrar en él su producción.
En la inauguración en el Teatro La Torre (sede de las Jornadas) a la que asistieron las autoridades municipales y del Festival, los invitados, la prensa y el público pinamarense el joven intendente Martín Yeza se mostró feliz con esta nueva incorporación al calendario cultural anual del municipio: “queremos pensar en Pinamar como una ciudad cultural, recuperar parte de nuestra tradición que en los 90 se perdió y UNCIPAR es un eslabón importantísimo en nuestro proyecto”. El también joven director de Cultura, Eduardo Isach, igualmente expresó su contento: “es un regalo muy lindo que Pinamar hoy tenga a UNCIPAR y que esta cinefilia se extienda a otros centros como Cariló, Valeria del Mar y Ostende”. Finalmente Liliana Amate como presidenta de UNCIPAR destacó el trabajo colectivo de quienes forman parte de estas jornadas: “hay un conjunto de personas que luchamos para que estemos acá”.
De la Competencia Nacional compuesta por 35 cortos destaco La variación de López de Pablo Parra: un relato con aires borgeanos de duelos a cuchillo y heroicidad y dignidad en juego (que también remiten al Bioy Casares de El sueño de los héroes) y las posibilidades de otras vidas y otras elecciones con contratos demoniacos a cambio, bien filmado y actuado; El chicho de Leandro Sulia Leitón: seco y tensionante relato de violencia y revancha en un pueblo del sur con una agobiante puesta en escena y encuadres precisos; Diamante mandarín de Juan Martín Hsu que muestra con inteligencia y precisión el interior de un supermercado chino cerrado durante los días de diciembre de 2001 en el que se conjugan los mitos sociales, la inmigración y el desarraigo, la soledad, la jerarquía familiar oriental y un afuera acechante a través de un trabajo de cámara y fuera de campo destacadísimos y un equipo actoral de relevancia; El dorado de Ford de Juan Fernández Gebauer: con un relato de herencia y apropiación de legado paterno en tono de fábula e inocencia que no evita cierto humor negro y absurdo y no cae en sentimentalismos maniqueos; El enroque de Mercedes Laborde y La humedad de Gonzalo Javier Zapico también recurren al sentimiento y la emoción sin golpes bajos en sendas historias de padres e hijos/as, con actuaciones a destacar; Princesas de Natural Arpajou cuenta un día en la vida laboral como mucama de un hotel de una joven paraguaya, madre soltera, que ha llevado a su pequeña hija con ella y con una acertada y sutil puesta en escena nos habla de las diferencias sociales, la abnegación, el amor incondicional y una sociedad que se niega a ver; Cuchipanderos de Agostina Guala retrata un vínculo de amistad de hombres de sesenta atravesando un momento terminal y definitivo con ajustada, verosímil, sutil y emotiva mirada y un cuarteto de actores impecables.
En la Competencia Internacional la violencia, la guerra, la destrucción por parte de los hombres y sus consecuencias atravesaron en diferentes relatos, formas y técnicas gran parte de los 32 cortos que se exhibieron. Destaco Bendito Machine de Jossie Malis (España) que con una animación simple pero contundente desarrolla una cadena histórica donde las máquinas y la tecnología se unen a la fuerza y el poder para contar a la humanidad; Oquedad de George Galvis Monsalve (Colombia) el regreso de un hijo a la casa familiar pero muerto por la guerra y la respuesta de una madre con la sabiduría pueblerina en un melodrama doliente; The chicken de Una Gunjak (Alemania) y el retrato de la guerra en los Balcanes a través de la cotidianeidad de una madre y sus dos hijas con un quiebre de tono que irrumpe y patina los últimos minutos; The trench de Javier Llamazares (España) en un blanco y negro seco un encuentro en las trincheras entre dos hombres que la guerra hizo enemigos; Metamorfosis de Frederic Every y Lousi Mercadier, quienes en una animación exquisita se animan a reversionar el clásico relato kafkiano con notables resultados.
Durante la ceremonia de cierre y premiación se proyectaron los cortos filmados tanto en el Taller de Animación a cargo de docentes de la ENERC como en el Taller de Cine con Vecinos dictado por Fabio Junco y Julio Midú, ambas nuevas actividades incorporadas a UNCIPAR.
Los premios otorgados por los jurados oficiales fueron:
Competencia Nacional:
-1° Premio: Diamante mandarín de Juan Martín Hsu
-2° Premio: Berta y las menores de Marina Glezer
-Menciones: Fuego de Pablo Penchansky, Daño moral de Gonzalo Basilo, y Papel y tinta de Gabriel de Bella.
Para formar el programa de cinco cortos: Diamante mandarín, Berta y las menores, La humedad de Gonzalo Zapico, Durazno de Francisco Ríos Flores y Una de esas noches de Germán Servidio.
Competencia Internacional:
-1° Premio The chicken de Una Gunjak
-2° Premio Un cuento de amor, de locura y muerte de Mijail Bustos Gutiérrez
-1ª Mención The trench de Javier Llamazares.
-2ª Mención Bendito Machine de Jossie Malis
-3ª Mención Oquedad de George Galvis Monsalve
El Premio Especial Pinamar, cuyo jurado fue el director de cine y vecino del Municipio Juan Carlos Desanzo, recayó en Berta y las menores.
La ACCA (Asociación de Cronistas Cinematográficos de la Argentina) premió a Cuchipanderos de Agostina Guala; el Premio INCAA TV fue para Erase una vez de Patricio Vega; Premio Argentores para Diamante mandarín y Premio RAFMA (Red Argentina de Festivales y Muestras Audiovisuales) para Durazno.
Antes de la proyección de los cortos ganadores quedó en claro que estas Jornadas están vivas y que esta edición fue un nuevo renacer, que Pinamar demostró poder y querer ser sede de otro Festival y que los cortometrajistas tienen en UNCIPAR una pantalla siempre abierta (y con entrada libre y gratuita para todas las actividades) para mostrar su arte.
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