Por Rodrigo Seijas
Y sí, llegó el primer capítulo de transición de la sexta temporada de The walking dead. Y es Here´s not here, que encima fue más extenso de lo habitual (unos veinte minutos adicionales), y que por momentos aburrió, sin poder salir de unos cuantos esquematismos bien de manual dramático, pero que también tuvo un par de secuencias de alto nivel.
Lo que se cuenta es bastante simple y da para pensar si no bastaban algunos breves flashbacks como para redondear bien el camino recorrido por Morgan, quien le cuenta a uno de los Lobos cómo es que conoció a Eastman –la traducción de este apellido es “hombre del Este”, y teniendo en cuenta la filosofía de vida del personaje, es difícil que haya sido antojadizo-, un hombre caracterizado por permanente búsqueda de paz interior y con un lema para enfrentarse al caótico mundo dominado por los zombies: “toda vida es valiosa”.
Lo que se va viendo es un típico cuento de aprendizaje, de vínculo maestro-alumno, con muchos lugares comunes sobre la dificultad para entenderse y asimilar enseñanzas, pero sostenido primariamente en las excelentes performances de Lennie James y especialmente John Carroll Lynch, uno de esos típicos actores de reparto capaces de amoldarse a cualquier rol con extrema prestancia.
Llama la atención cómo una serie de alto nivel dramático como The walking dead caiga de manera casi sistemática en estos capítulos de relleno que son como lagunas narrativas que aportan en verdad poco al conjunto. Más todavía cuando en Thank you habían quedado múltiples tramas y subtramas abiertas, y que determinados aspectos de la historia y personalidad de Morgan, como habíamos dicho previamente, podían ser explorados sin tener que recurrir a un episodio de más de una hora.
Aún así, se puede citar por lo menos una secuencia perfectamente delineada desde los diálogos –o más bien monólogo- y las actuaciones, que es cuando Eastman cuenta cómo fue que conoció al verdadero mal, a un verdadero psicópata, y las consecuencias profundamente personales que tuvo para sí mismo el echarle un vistazo a la maldad absoluta. Es una historia narrada con parsimonia y dolor a la vez, que entabla lazos seguramente involuntarios con el relato de venganza de El secreto de sus ojos –muy buen aporte de Rosana López desde su Facebook-, contribuyendo a darle espesor al personaje de Eastman y su relación con Morgan.
Here´s not here no es un mal episodio de The walking dead y es innegable que tiene un ajustado trabajo desde el encuadre y la composición visual por parte del director Stephen Williams, pero al momento de su visionado se muestra como poco necesario. Eso sí, posee un plano final anticipatorio de lo que viene que crea una gran expectativa de cara al siguiente episodio, titulado Now. Veremos qué pasa en ese “ahora”. El “antes” no fue del todo interesante.