La violencia extrema se introdujo este sábado en el Festival de Cine de San Sebastián con I saw the devil, del director surcoreano Kim Jee-Woon, en la segunda jornada del certamen vasco, en que también se presentó la española El gran Vázquez.
El filme, de casi dos horas y media, narra el quehacer de un asesino en serie que tortura y descuartiza a sus víctimas, mujeres jóvenes, y el del marido de una de ellas, un agente secreto que se propone acabar con él y acaba convirtiéndose en lo mismo que su presa.
Las profusas escenas de extrema violencia, que en su país pasaron por dos procesos de censura y recorte y de las cuales el festival advirtió en su programa, hicieron abandonar la sala a un puñado de espectadores.
Sin embargo, para Kim son un recurso y no un fin en sí mismo, explicó en conferencia de prensa. “El filme trata de la ironía de la vida: yo quería contar que para castigar a un diablo y realizar la venganza perfecta hasta qué punto hay que convertirse en un diablo», según el director, muy conocido en su país y asiduo del Festival de Cannes.
Kim, realizador de A Tale of Two Sisters, A Bittersweet Life y The Good, the Bad, the Weird, reconoció que I saw the devil es el filme que «peor resultados comerciales» ha tenido en su país de toda su carrera «debido a la violencia». Pero quiso mostrarla porque «la violencia tiene muchísima influencia en esta sociedad». Su película es una de las 15 que optan a la Concha de Oro, el principal galardón del Festival de San Sebastián.
Este sábado también se presentó en sección oficial la española El gran Vázquez, de Oscar Aibar, sobre la vida del dibujante de historietas Manolo Vázquez, estrella de la editorial barcelonesa Bruguera en los años sesenta con sus personajes Anacleto, las hermanas Gilda o el tío Vázquez.
El filme, una comedia protagonizada por Santiago Segura (Torrente, el brazo tonto de la ley), muestra al vividor, mujeriego y timador y a la vez a este artista querido por niños y adultos que luchó por los derechos de autor en los años 60. A la vez, “trata de esbozar las luces y sombras de la vida del dibujante, aunque sin ridiculizarle», aseguró Segura, que prepara la cuarta entrega de la saga Torrente.
También se estaba presentando la germano-suiza Colours in the dark, ópera prima de Sophie Heldman protagonizada por el veterano actor suizo Bruno Ganz (La caída). Además, el cineasta español Alex de la Iglesia, ganador del León de Plata en el último Festival de Venecia por Balada triste de trompeta, recibió el Premio Nacional de Cinematografía que otorga anualmente el ministerio de Cultura.
El director vasco, de 44 años, que también es el presidente de la Academia española de Cine, recogió el galardón, dotado con 30.000 euros, en el Teatro Victoria Eugenia de manos de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde. De la Iglesia ha dirigido, entre otras, Los crímenes de Oxford, La comunidad y El día de la bestia, ganadora de un Goya al mejor director.
(Fuente: AFP)