Por Patricio Beltrami
Este artículo contiene spoilers.
El tercer capítulo de Hawkeye fue una montaña rusa de emociones que osciló entre la tragedia y el drama familiar, escenas de acción creativas, y la comedia desatada que se esperaba ver en Loki. En este marco, Echoes indaga en la vida de Echo (Alaqua Cox), líder de la Tracksuit Mafia, y, también, profundiza en los peligros que acechan a los héroes. A su vez, el episodio contiene las primeras secuencias de acción de la dupla Clint Barton (Jeremy Renner) – Kate Bishop (Hailee Steinfeld) y, además de la dinámica en combate, se establece que el vínculo está basado en la honestidad, el respeto y la admiración mutua. Dirigido por Bert & Bertie y escrito por Tanner Bean y Katrina Mathewson, Echoes inicia con un flashback de la niñez de Maya López (Darnell Besaw), una niña sordomuda de gran intelecto y habilidades en pelea y artes marciales. En ese orden, se exhibe el vínculo afectuoso que la unía a su padre William (Zahn McClarnon), similar al de Kate con Derek (Brian d’Arcy James). A su vez, se reseña la misteriosa figura del tío, quien es mencionado como el jefe de la criminalidad en Nueva York. Durante el blip Ronin elimina a la Tracksuit Mafia original y asesina a William frente a Maya, acto que justifica la cacería sobre Bishop, sospechada de ser la infame ninja. Allí arrancan veinte minutos repletos de acción y comedia. Atados en un local de juegos para niños, Echo y Kazi (Fra Fee) exigen explicaciones a Barton, quien niega que Kate sea la persona que buscan. Además, afirma que Viuda Negra había asesinado a Ronin. Pese a la tensión, Clint y Maya desarrollan una dinámica particular a partir de los problemas auditivos del vengador. Pero todo se desmadra cuando Barton escapa y enfrenta a los rusos. De una patada en la cabeza, Echo le rompe su audífono y, aunque queda algo desorientado, Hawkeye recupera su arco y sus flechas para liberar a Kate y doblegar a sus enemigos. Todo esto a través de secuencias de combate bien coreografiadas, explotando la autoconsciencia (flechazos imposibles que apenas entran en el verosímil) y los espacios del local (homenaje a Tiburón en el pelotero). Mientras suena Tchaikovsky en el auto robado, los arqueros escapan a toda la velocidad y los rusos los persiguen. En un plano secuencia de aproximadamente un minuto, la cámara gira 360° desde el asiento trasero mientras un sordo Clint maneja y Kate se acomoda en la ventana para lanzar una insólita variedad de flechas que terminan con vehículos explotados, atorados entre pinos navideños, o parabrisas llenos de espuma. Acorralados en un puente, los héroes realizan dos tiros al aire para crear una flecha gigante que cae sobre una camioneta. Luego, ambos se cuelgan del puente sujetándose al arco y caen en el techo del subte. A salvo de la mafia, Clint elogia las habilidades de Kate, que insiste en mejorar la marca Hawkeye con un ridículo uniforme, idéntico al que el héroe usa en los cómics. Antes de nombrar Pizza al perro y reparar el audífono, Clint recibe un llamado de su hijo menor, Nate. Ante la imposibilidad de oírlo, Bishop trascribe las palabras del pequeño en un anotador. En una desgarradora escena, Barton comprende que se está perdiendo otra Navidad en familia, aunque no duda en prometerle al desilusionado Nate que volverá al hogar para el 25. En tanto, la dupla se infiltra en el departamento de Eleonor (Vera Farmiga) para investigar el rol de Jack (Tony Dalton) con el asesinato de Armand. Tras descubrir que Kazi figuraba en la base de datos de la empresa de Kate, alguien bloquea la cuenta de la joven, al tiempo que, desde las sombras, Jack sorprende a Barton poniéndole una espada a centímetros del cuello. Echoes estableció a Echo y Jack como dos grandes amenazas para los arqueros y, además, introdujo a la enigmática figura del jefe de las mafias de Nueva York. Probada la dinámica entre los héroes, finalmente se observó que poseen la misma química en combate. Más allá de que el escape y la persecución hayan tenido altas dosis de autoconsciencia y comedia, la dupla funcionó a la perfección frente al asedio. No obstante, todo indica que los peligros que habrá en la segunda parte de la temporada estarán a la altura de un vengador.
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