Título original: Ídem
Origen: EE.UU. / China / Tailandia
Dirección: Jesse V. Johnson
Guión: Joey O’Bryan, Fangjin Song, Paul Staheli
Intérpretes: Iko Uwais, Tony Jaa, Tiger Hu Chen, JeeJa Yanin, Scott Adkins, Michael Jai White, Michael Bisping, Dominiquie Vandenberg, Ron Smoorenburg, Monica Siu-Kei Mok, Anthony Tai, Daniel Whyte, Selina Lo, Damon Whitaker, Celina Jade
Fotografía: Jonathan Hall
Montaje: Matthew Lorentz
Música: Joel J. Richard
Duración: 96 minutos
Año: 2019
3 puntos
LA EXPECTATIVA VERSUS A LA REALIDAD
Por Rodrigo Seijas
Uno veía los nombres que aparecen en el reparto de Triple threat y no podía menos que tener una expectativa bastante grande por el potencial desplegado: estrellas de acción como Iko Uwais, Tony Jaa, Tiger Hu Chen, JeeJa Yanin, Scott Adkins, Michael Jai White y Michael Bisping, como si se tratara de juntar buena parte de los mejores exponentes de Oriente y Occidente. Pero, indudablemente, una cosa es acumular nombres y otra muy distinta es construir un relato que los pueda agrupar de la forma adecuada.
Y eso que la premisa era prometedora desde su simplicidad: hay una millonaria (Celina Jade) que quiere destinar su fortuna al combate de un sindicato criminal, con lo que se convierte en el blanco de un grupo de asesinos profesionales y su única defensa termina siendo un trío de mercenarios que tienen sus propias motivaciones. Sin embargo, para terminar de construir ese planteo, la película necesita una media hora bastante confusa, que ni siquiera le sirve para delinear apropiadamente a los distintos personajes. Sí podemos saber que Adkins, White y Bisping son los malos malísimos; que Uwais, Jaa y Chen son tipos rudos pero en el fondo buenos; y que Jade es una idealista de campeonato, pero no mucho más. Ahí, Triple threat ya evidencia unas cuantas debilidades, porque nunca podemos conectar con los protagonistas y sus diversas motivaciones.
Si el film entonces depende más de las secuencias de acción que desde su poder narrativo, la puesta en escena de las peleas y tiroteos está bastante lejos de poder explotar adecuadamente las habilidades de los actores. Se puede intuir que hay un par de bestias de las artes marciales –particularmente Adkins, Chen y Jaa-, pero son solo chispazos, meras insinuaciones. Incluso Uwais está bastante desperdiciado y White hasta luce un poco cansado, como si las coreografías se olvidaran de lo que pueden dar. Hay demasiados momentos donde la película hasta parece barata, como hecha a las apuradas y sin ganas, sin un verdadero amor por el género.
A medida que van pasando los minutos, Triple threat va perdiendo cada vez más energía, hasta arribar a un enfrentamiento final carente de impacto. Lo que queda es una película intrascendente, sin brío ni riesgo, que decepciona por completo.