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Operación hermanos

Título original: Operation Brothers
Origen: EE.UU.
Dirección: Gideon Raff
Guión: Gideon Raff
Intérpretes: Chris Evans, Alessandro Nivola, Haley Bennett, Michiel Huisman, Ben Kingsley, Michael Kenneth Williams, Greg Kinnear, Mark Ivanir, Alex Hassell, Alona Tal, Chris Chalk, Vere Tindale
Fotografía: Roberto Schaefer
Montaje: Tim Squyres
Música: Mychael Danna
Duración: 129 minutos
Año: 2019


6 puntos


ESPIONAJE Y TURISMO

Por Mex Faliero

(@mexfaliero)

A principios de la década de 1980 la Mossad (la agencia de seguridad israelí) llevó adelante una curiosa misión para rescatar y evacuar a cientos de etíopes judíos que habitaban Sudán y fueron trasladados, de incógnito, a Israel. La forma que se encontró fue la de instalar una suerte de resort y escuela de buceo en la costa, que no era otra cosa que una fachada, regenteada por agentes secretos, para sacar vía marítima a los refugiados (todo el plan tiene un componente humorístico que la película decide obviar, casi, por completo). La misión, como decíamos, tiene sus peculiaridades y sus elementos llamativos como para ilustrar un interesante film de espionaje, situación aprovechada a medias en Operación Hermanos por el director Gideon Raff, conocido internacionalmente por ser el creador de la versión original de la exitosa serie Homeland.

Operación Hermanos se construye sobre la base de retazos de cine de género, y lo mejor que tiene para ofrecer es ese acercamiento a un hecho real alejándose de la mera mirada ilustrativa. No hay wikipedismo en Raff, sino la clara intención de jugar con los elementos del thriller y potenciar el carácter increíble de la misión que llevan adelante los espías. Con algunas lecciones del cine clásico aprendidas, lo fundamental aquí son los personajes, su drama humano, y la formación del grupo. En la primera parte del relato vemos al agente interpretado por Chris Evans tratando de convencer a sus superiores de que la misión es posible, armando el grupo de trabajo con individuos de lo más heterogéneos y combatiendo contra sus propios demonios. El componente heroico está presente aquí y el Ari Levinson de Evans se debate entre su individualismo y las consecuencias que sus decisiones arrebatadas pueden llegar a generar. En ese conflicto, que explota con la presencia de otro espía interpretado por Alessandro Nivola, podemos adivinar la tesis principal de la película, esa que mira un poco las acciones públicas y las privadas.

Claro que la decisión de Raff por potenciar el carácter genérico de su película, de apostar por el suspenso y el enfrentamiento entre buenos y malos, de las escapadas a último momento y contrarreloj, hace que el film nunca alcance una profundidad mayor. Ni qué decir su reflexión política, supeditada a un esquematismo de villanos caricaturescos y héroes impolutos, aún con sus conflictos menores a cuesta. Sumado a esto, el carácter televisivo de algunos recursos que el director utiliza vuelve a Operación Hermanos un film entretenido, sí, pero rutinario y bastante menor. Cuando vemos esta película es imposible no acordarse de Argo, de cómo lo político puede alimentar los alcances del thriller y cómo el cine de entretenimiento puede no darle la espalda a la complejidad. Operación Hermanos termina siendo, un poco a su pesar, más una actualización culposa del cine de acción de los años 80’s que una mirada actual a los conflictos geopolíticos del mundo.

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