Este clásico inoxidable supo ser una gran demostración de cómo Hollywood era capaz de ir a la guerra por distintos medios, ofreciendo un relato que hacía un gran uso de la mixtura de géneros.
En tiempos donde la política no muestra un rumbo sano, esta obra maestra de Frank Capra nos recuerda que hay valores, ideas y concepciones por las que siempre vale la pena luchar.