Por Mex Faliero
El director Steven Soderbergh y el guionista Ed Solomon vuelven a colaborar tras la miniserie Mosaic y el largometraje Ni un paso en falso en esta miniserie de seis episodios centrada en un secuestro que sale mal. En verdad, el secuestro es apenas una excusa argumental para que los autores ofrezcan una mirada caleidoscópica sobre aspectos sociales, económicos, culturales (hay toda una subtrama espiritual que increíblemente fluye bien con el tono de policial seco), que atraviesan clases y que van de sectores pudientes neoyorquinos a marginales, en la figura de un grupo de inmigrantes ilegales de Guyana. Precisamente el último plano parece ser bastante conclusivo respecto de las intenciones principales de Soderbergh y Solomon, una imagen que guarda una amarga ironía. Pero para que todo este entramado de personajes y situaciones, algunas de ellas un poco inverosímiles, funcionen, se cruzan algunos factores. Primero Solomon, que como guionista se mete en temas áridos, pero siempre tiene una mirada irónica que aminora la carga (de hecho, ha escrito mayormente comedias). Segundo Soderbergh, que como director parece haberse alejado definitivamente de cierta búsqueda de prestigio y se ha convertido en un sólido artesano que filma lo que le pongan enfrente. Su estilo de cámara en mano le da una vibración al relato y su habilidad como narrador hace que Full circle resulte bastante clara cuando podría haberse vuelto un poco confusa (algo que sí pasaba en Ni un paso en falso). Y finalmente un elenco extenso repleto de figuras (Zazie Beetz, Claire Danes, Jim Gaffigan, Timothy Olyphant, CCH Pounder, Dennis Quaid, William Sadler) que logran que el espectador empatice rápido con sus conflictos (y la miniserie nos exige un rápido involucramiento), además de construir personajes con dos o hasta tres caras. Porque Full circle indaga en la fachada de los personajes, revelando secretos, pero diciendo que ningún secreto es suficiente y siempre habrá algo peor si seguimos escarbando: Ahí tenemos al matrimonio de Danes y Olyphant, construido sobre una base de mentiras y pasados turbulentos. En una trama llena de mentirosos, obviamente Soderbergh y Solomon se reservan la moral de su relato en un par de personajes, que son debidamente salvados aunque sin antes aprender la lección. Y si bien la miniserie se llama Círculo cerrado, quedan cabos sueltos que más que con resoluciones de conflictos tienen que ver con la conciencia de los personajes y su existir luego de esta historia. De manera vertiginosa, Full circle nos lleva de paseo por un paisaje en el que la doble moral se va derribando progresivamente y los personajes tienen que vivir con esa verdad.
NdR: Los seis episodios de Full circle están disponibles en la plataforma HBO Max.
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