Robby Müller, director de fotografía holandés de emblemáticos films como Bailarina en la oscuridad, Bajo el peso de la ley, El reclamador, Vivir y morir en Los Ángeles y París, Texas, murió hoy en Amsterdam. Tenía 78 años y había estado sufriendo de demencia vascular por varios años.
Müller fue conocido por su colaboración con realizadores como Wim Wenders, Jim Jarmusch, Lars von Trier, Alex Cox, William Friedkin y Barbet Schroeder, que crearon algunos de los notables films de autor de los ochenta y noventa.
Como europeo, supo aportar un memorable abordaje a la ciudad de Los Ángeles en Vivir y morir en Los Ángeles, de Friedkin; Barfly, de Schroeder; y El reclamador, de Cox. La última película en la que trabajó fue Manchester 1970-1990: La fiesta interminable, film del 2002 dirigido por Michael Winterbottom.
Nacido en Curacao en las Antillas Holandesas, Müller estudió en la Academia de Cine de Holanda. Formó una gran dupla creativa con Wenders, con quien trabajó en Alicia en las ciudades, El amigo americano, En el transcurso del tiempo, Hasta el fin del mundo y París, Texas.
Otro realizador con el cual tuvo un aceitado vínculo fue Jarmusch, para quien trabajó en Bajo el peso de la ley, Dead man, Mystery train y Ghost Dog: el camino del samurái. El director, en su cuenta de Twitter, lo recordó como una importante influencia, afirmando “sin él, no creo que habría sabido nada acerca de la realización de cine”.
(Fuente: Variety)