No estás en la home
Funcinema

The ridiculous 6

ridiculous1Título original: Idem
Origen: EE.UU.
Dirección: Frank Coraci
Guión: Tim Herlihy, Adam Sandler
Intérpretes: Adam Sandler, Terry Crews, Jorge Garcia, Taylor Lautner, Rob Schneider, Luke Wilson, Will Forte, Steve Zahn, Harvey Keitel, Nick Nolte, Jon Lovitz, Whitney Cummings, David Spade, Danny Trejo, Nick Swardson
Fotografía: Dean Semler
Montaje: Tom Costain
Música: Rupert Gregson-Williams, Elmo Weber
Duración: 119 minutos
Año: 2015
Compañía editora: Netflix


5 puntos


El hombre que ya no ríe

Por Mex Faliero

(@mexfaliero)

ridiculous2La fusión entre Adam Sandler y Netflix parecía llegar en el momento oportuno. Básicamente interesaba ver cómo el universo del comediante se retroalimentaba de la libertad que parece otorgar la productora: ahí tenemos la mezcla de tonos y humores de la tan brillante como inclasificable Wet hot american summer. Luego de varios fracasos artísticos, estaba la posibilidad de que Sandler pudiera dar pasos más sólidos y encontrar en este formato (una especie de regreso a las fuentes de su humor televisivo) un lugar mucho más cómodo donde maniobrar con otros objetivos. En Son como niños 2 podíamos ver esa intención de volver a los tiempos donde la búsqueda del chiste importaba más que la bajada de línea familiar, aparente motivación de sus últimas películas. Por eso, The ridiculous 6 generaba expectativas en nosotros, integrantes del Team Sandler.

Antes que nada hay que decir que The ridiculous 6 no es una sátira del western, es un western hecho y derecho, que tiene como elemento distinguible el humor desaforado de la factoría Happy Madison. Por eso tanto el prólogo como el epílogo tienen más dramatismo que comedia: es donde los conflictos humanos, inherentes al género, se plantean y se resuelven… a los tiros. Y otra particularidad, la mayor del film, es que Sandler interpreta a un personaje carente de humor y no sólo eso: su Tommy no participa en la construcción de los chistes, juego que el comediante abre hacia el resto de sus partenaires, como es habitual en él pero de manera mucho más explícita aquí. En eso hay una elección deliberada, Sandler interpreta a un personaje adusto e impertérrito, que trabaja una línea histórica del western clásico.

Pero más allá de las decisiones tras The ridiculous 6, que muestran en todo caso un proceso de creación y construcción del universo planteado -aquí no hay pereza-, lo que falta llamativamente a la cita es el timing del humor, eso de lo que Sandler hacía gala tiempo atrás: ya que la película dure 119 minutos es una demostración de escaso poder de síntesis. Hay un regreso a cierta escatología indolora que sólo causa un poco de vergüenza ajena y una apuesta por el slapstick no del todo bien resuelta. Lo que mejor funcionaba en el viejo Sandler, detrás de la virulencia y la contundencia de los gags, era una cierta sensibilidad generacional vinculada con los años 80’s, algo que aquí, por obvias razones, resulta impracticable. The ridiculous 6 tarda en armarse y cuando lo hace, se convierte en un mecanismo que funciona a veces: y ahí salen algunos grandes momentos, como cuando se juntan en una partida de póquer Custler, Twain y Earp, o aquellas instancias en que los hermanos alcanzan confianza y sentido de grupo, verdadero espíritu de las comedias sandlerianas.

Pero The ridiculous 6 es una película con demasiados altibajos como para ingresar en el cuerpo de obra de un comediante fundamental como lo es Sandler. Que ya ni siquiera se ría y el humor le pase por el costado a su personaje, es todo un símbolo de agotamiento. Sandler todavía vive un poco de la memoria emotiva que desprenden sus viejas películas,  pero ya cuando ni siquiera eso quede se convertirá en uno de esos artistas decadentes que siguen sacándole lustre a un chiste que murió mucho tiempo atrás.

Comentarios

comentarios

Comments are closed.