Buena
Desde el piso
Por Rodrigo Seijas
En esa búsqueda que plantea Embiste desde la danza-teatro en combinación con la música, explorando la identidad corporal en escena, parece ser fundamental, de manera casi inconsciente, el piso. Es decir, el lugar desde donde los cuerpos despegan, nacen, adquieren constancia, textura y plasticidad, para finalmente detenerse, apagarse, aunque nunca termine de quedar claro si esos cuerpos pueden arribar a un final de su movimiento.
Se podrá decir que la serie de preguntas que se plantea el espectáculo de Catalina Briski -¿quién soy yo? ¿Cómo me defino? ¿Quién es el otro? ¿Incide en mi propia identidad? ¿De dónde provengo? ¿Hacia dónde voy?- han sido transitadas por la danza, el teatro y hasta la música de múltiples formas, pero igual se adentra en ese terreno, sabiendo que aún hay muchas respuestas (y nuevas preguntas) por encontrar. Y con esa sapiencia, encuentra el espacio propio justo como para afirmar su propio camino, su propia definición.
Porque de eso se trata la obra: de una búsqueda identitaria, de una narración personal definida por los cuerpos que la atraviesan. La sensación –saludable por cierto- es que sí, Briski juega un rol central desde la idea, la dirección y hasta con su propio cuerpo participando en la escena, es que la exploración es colectiva, que Embiste es el trabajo de mucha gente desde la puesta en escena, la interacción con el espacio y entre los propios cuerpos, con lo musical como factor narrativo. Un trabajo en conjunto que goza de armonía incluso en los momentos de choque y conflicto.
De a poco, a medida que transcurren los minutos, Embiste va definiéndose, encontrándose, hallando su propio ritmo y tono, como una composición sonora con diferentes pasajes y momentos, pero también como un armado visual integrado por distintos cuadros, recortes y profundidades. Hasta se puede decir que lo plástico hace acto de presencia aunque inserto y difuso en los movimientos.
Por momentos abrumador –aunque esto sea comprensible gracias a una atmósfera donde la conjunción de lo corporal y musical crean un compromiso casi inevitable para el espectador-, Embiste es un espectáculo que recupera y actualiza el compromiso de las artes con el sujeto, que interpreta y significa a la vez, combinándolas y moldeándolas a su modo, evidenciando una persistente y potente originalidad. Y siempre contando como impulso con el piso, con esa instancia dura, fría y hasta dolorosa, pero fundamental, donde todos empezamos y terminamos.
Intérpretes: Amparo Alabarces, Catalina Briski, Victoria Morante Músicos: Nicolás Boccanera, Ariel Invernizzi Vestuario: Manola Beltrami Iluminación: Marcelo Pérez Audiovisuales: Bernardo Blanco, Mercedes Invernizzi Fotografía: Juan Esteban Ángel Dibujos: Fabio Preyra Diseño gráfico: Paz Agustina Perczyk Asistencia de dirección: Julieta Martin Prensa: Octavia Comunicación Puesta en escena: Agustín Melillo, Rym Tarfaya Dirección: Catalina Briski Duración: 50 minutos Sala: Centro Cultural El Sábato (José E. Uriburu 763, Subsuelo, CABA) – Sábados a las 22:30.
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