Cary Fukunaga se ha bajado de la dirección de la nueva adaptación de IT. La noticia se conoce apenas unas semanas después de que Will Poulter entrara en negociaciones para interpretar al maligno payaso Pennywise, pero no se sabe si la partida del director tendrá algún impacto en el casting.
Se esperaba que el proyecto comenzara con su producción este invierno, pero esos planes han sido retrasados, poniendo el futuro del film en peligro.
Aparentemente, el realizador chocó numerosas veces con los ejecutivos de New Line, ya que no quería sacrificar su visión artística luego de que el estudio demandara drásticos cortes presupuestarios.
El proyecto inicialmente se desarrolló en Warner Bros., antes de mudarse a New Line Cinema, lo que según parece fue otra razón para la partida del cineasta. Fukunaga también se había empeñado en rodar en la ciudad de Nueva York, que es mucho más cara que otras locaciones. Asimismo, el estudio comenzó a ponerse nervioso respecto a la probabilidad de éxito de la película este fin de semana, cuando el estreno de la remake de Poltergeist no se desempeñó tan bien como muchos esperaban en la taquilla.
Fuentes internas afirman que el proyecto está actualmente muerto, pero no está claro si New Line buscará otro guionista para armar un nuevo abordaje. Fukunaga también co-escribió el guión junto a Chase Palmer, por lo que parece claro que su visión ha sido totalmente descartada. El director planeaba hacer una adaptación de dos partes de la novela de Stephen King, la primera de las cuales iba a seguir un grupo de amigos de la infancia conocido como El Club de los Perdedores, quienes derrotan a una entidad sobrenatural disfrazada de un payaso conocido como Pennywise. La segunda película estaría situada años después, con los protagonistas ya adultos y forzados a enfrentarse a Pennywise nuevamente.
Según parece, New Line ahora querría hacer “una película larga”, donde aparecieran tanto los niños como los adultos. La producción de IT correrá por cuenta de Roy Lee, Dan Lin, Doug Davison, Seth Grahame-Smith y David Katzenberg.
(Fuente: The Wrap)