Bradley Cooper debuta en la dirección con esta remake de un clásico del cine norteamericano, y muestra con gran pulso y grandes actuaciones que las historias simples todavía sirven para generar emociones.
El nuevo intento de Taylor Lautner por posicionarse dentro del género de acción tiene algunas secuencias con bastante vigor, pero eso no alcanza dentro de un relato sin una pizca de originalidad.