Un film que podría haber sido mínimamente decente en su combinación de acción y comedia, pero que termina siendo un desastre total, con actuaciones pésimas de Thomas Jane y John Cusack.
Un thriller que sin ser original lleva su relato con fluidez y sobriedad, ayudado en buena medida por las actuaciones de Susan Sarandon y Topher Grace, entre otros.
Hoy se termina Mad Men y el autor señala la realidad que se esconde detrás de una mera frase promocional: la serie de Matthew Weiner cimentó ese piso de calidad que la televisión norteamericana ha logrado en este tiempo.
La nueva entrega de la saga creada por George Miller posee no pocos elementos interesantes. Sin embargo, no justifica del todo la inmensa euforia que la rodea.