Ladran Sancho, es decir, dijimos la verdad sobre Malvinas
Por Virginia Ceratto
(especial para @funcinemamdq)
Detesto la autorreferencialidad, pero en esta ocasión…
En primer lugar, pido perdón a los perros, aludidos en el título… ellos ladran y no son seres malos, ni malas bestias, como quien denunció, en un intento torpe que no durará, el corto InvictXs, proyectado el 31 de marzo pasado en la Sala Piazzolla. Corto que cuenta la verdad sobre Malvinas, y que fue censurado por la plataforma YouTube, desde la que, paradojalmente, se tomaron las imágenes que supuestamente infringen vaya a saber una qué.
Fui parte de ese proyecto, de hecho corregí el texto, agregué unas frases, solamente, y verifiqué, con historiadores, cada dato que fue recopilado, exhaustivamente, por el realizador, Darío Ponce de León. Gran cineasta, de paso. La música fue compuesta especialmente por Luis Reales, es decir que no hay plagio, ni se usurpa ningún copyright. O como se diga.
Aclarada la supuesta infracción, que no hubo, ni hay, solamente nos queda -me queda- pensar que alguien, que no quiere decir lo que sabemos, que esa Guerra fue un manotazo de ahogado de la Dictadura Genocida, para ser breve, y que trata de tapar el sol con un dedo, mocho, encima, denunció el corto, y Youtube no verificó nada. Mal hecho muchachos.
Además, InvictXs ya fue solicitado, y por supuesto compartido, por escuelas, sindicatos, la Secretaría de Derechos Humanos de Avellaneda. Está siendo compartido desde el blog de una escuela, y más adelante me detendré en esto, con otros colegios. Por cierto, los asistentes de la Piazzolla -entre quienes estaba un ex combatiente, que fue homenajeado como corresponde- aplaudieron la proyección. Por eso digo que el intento de censura no llegó ni llega más que a la indignación. Pero sí vulnera derechos, y esto es gravísimo, porque vulnera, sobre todo, los derechos de los estudiantes que aprenden a conservar la Memoria y a defender la Verdad y la Justicia, en este caso por medio de un contenido audiovisual.
Y aquí me detengo. El director de un colegio que precisamente se llama Islas Malvinas, preguntó si teníamos tiempo para hacer un acto por Malvinas.
A partir de ahí se generó un equipo dispuesto y solidario.
El teatro cedió la sala.
Inspección autorizó la salida de los alumnos, docentes colaboraron con el armado. Se comenzó a pintar un mural, en paralelo. Los chicos se involucraron con la Historia. Otra institución sumó su maravilloso ensamble. Los integrantes de La corte de los milagros que quedamos, nos reunimos en tiempo récord. La agrupación Cinto Blanco, liderada por Milton Peralta, dijo sí… Milton es instructor de La corte…, el resto de quienes están en Cinto… no, pero igual subieron al escenario. La actriz Emma Burgos puso horas y horas de su vida, su vida, para compaginar su voz con la de Darío Ponce de León, en sucesivas grabaciones para el corto. También Emma interpretó un texto. Ya hablé de Luis Reales, ex y presente docente de La Corte, en la música original y en piano en vivo junto con las generosas Grisel Castro Santos y Florabril Leguimús. Rosana Muscari, Paola Chiatti, Claudia Díaz, codo con codo, en la organización y como puentes con ex combatientes con los que nos entrevistamos. Muchas personas, en unas tres semanas, logramos lo que hubiera sido más amigable hacer en meses. Lo hicimos.
No puedo imaginar las horas de Darío Ponce de León buscando, compaginando, porque si cuento solamente las que compartimos, en presencia o por mensajes, son incontables. Nadie trabajó, porque armar un acto de estas características es un trabajo relevante, por ego, o por dinero. Nadie. Y también acá ilustro sobre la logística del colegio para que los alumnos puedan asistir en horario de clase a una sala de teatro. Hay muchos permisos que lograr, porque los alumnos deben estar cubiertos por el seguro en tránsito.
Quisimos, como siempre, queremos, como seguirá sucediendo, que un acto escolar se transforme en una experiencia que sume lo artístico, para sumar desde la expresión. No siempre se puede, pero cuando sí se logra, es inolvidable.
Y motivador.
A la salida del acto muchos chicos ya estaban preguntando cómo participar, cómo aprender alguna disciplina artística.
Y no vamos a permitir que les metan miedo, que censuren sus derechos, entre los que se encuentran sus ansias de incorporar el arte a sus vidas.
No lo vamos a permitir.
Y encima, les vamos a contar que youtube, con minúsculas, ni siquiera chequea que el material que supuestamente infringía las normas de SU comunidad… es el material que se buscó en esa misma plataforma. Dicho de otro modo, ahora tendrían que borrar muchos contenidos. Muchachos, ¿no lo pensaron?
¿No pensaron que algún asistente al acto, entre quienes se contaban, por ejemplo, abogados, se hubiera quejado? ¿Creen que las personas no conocen la diferencia entre lo que se hace correctamente y lo que está mal?
Si el mensaje que se les da a los estudiantes es… no te muevas de tu zona de confort, hacé lo mínimo, no te comprometas, no investigues, no busques, porque podés meterte en problemas… ¿dónde quedaría la Educación para formar ciudadanos libres?
Esto es lo que me indigna.
Por lo demás, YouTube, en tu cara… como dicen, el corto se está viendo en el mundo.
No infringimos ninguna ley, ninguna normativa, el material es documental, la música original…
Nosotros, como en el corto, quedamos Invictxs. Uds. son… impresentables. Con minúscula. Ah, el corto está en Face, en muchos celulares, en muchos correos, en DV’s.
Nosotros cabalgamos, en caballos, por supuesto, que son más nobles y que no conocen, afortunadamente, de la estupidez humana ni de los intentos de silenciar lo que todos sabemos.
Invictos.
Si disfrutás los contenidos de Funcinema, nos gustaría tu colaboración con un Cafecito para sostener este espacio de periodismo independiente: