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Funcinema

Locked down

Título original: Ídem
Origen: Reino Unido / EE.UU.
Dirección: Doug Liman
Guión: Steven Knight
Intérpretes: Anne Hathaway, Chiwetel Ejiofor, Dulé Hill, Jazmyn Simon, Frances Ruffelle, Bobby Schofield, Tallulah Greive, Katie Leung, Mark Gatiss, Eva Röse, Ben Kingsley, Ben Stiller, Shereen Gray, Anna Behne, Andreas Grant, Alexandra Reimer-Duffy, Sam Spruell, Stephen Merchant, Mindy Kaling, Claes Bang
Fotografía: Remi Adefarasin
Montaje: Saar Klein
Música: John Powell
Duración: 118 minutos
Año: 2021


5 puntos


ROBO REMATRIMONIAL

Por Rodrigo Seijas

(@rodma28)

Durante los momentos más complejos de la pandemia para Hollywood a lo largo del año pasado, cuando la mayoría de los cines estaban cerrados y paralizados casi todos los rodajes, Locked down (que está disponible en HBO Max) era de los proyectos más comentados y que le daban algo de esperanza a una industria alicaída. En buena medida por los nombres involucrados: Anne Hathaway y Chiwetel Ejiofor en los protagónicos; cameos de Ben Stiller, Ben Kingsley y Mindy Kaling, entre otros; Doug Liman en la dirección; y Steven Knight en el guión. Pero también por la forma en que se fue gestando, con una preproducción veloz y un rodaje aún más rápido, de apenas dieciocho días, sin eludir las condiciones pandémicas e incluso aprovechándolas a su favor al ponerlas en primer plano. La cuestión es si las expectativas despertadas se correspondían con lo que iba a entregar el producto final.

Convengamos que la premisa tenía su atractivo: una pareja en crisis y al borde de la separación se encuentra, casi por casualidad, con la chance de ejecutar entre ambos un robo de alto calibre de unas joyas que están guardadas en una tienda en pleno confinamiento en Londres. Había ahí una promesa de relato aventurero, en el que la revitalización del amor matrimonial fuera a la par de la planificación y la ejecución del acto criminal, más aún si recordábamos que Liman había dirigido Sr. y Sra. Smith. Y es cierto que el realizador intenta una reescritura aquella entretenida comedia de acción romántica con Brad Pitt y Angelina Jolie, aunque en clave más neurótica, pero ese experimento no llega a funcionar del todo, como si el apuro por ensamblar el proyecto le hubiera jugado en contra.

Pero la urgencia no es lo único que conspira contra los objetivos que se propone Locked down: también la estructura de la trama, a la que le cuesta encontrar un foco narrativo preciso. Si por un lado vemos a esa pareja que ha perdido la magia del romance y debe lidiar con un encierro obligado, también está la voluntad de realizar una lectura sociológica -bastante superficial- sobre lo que traía aparejada la cuarentena en los vínculos personales y laborales; además de ese plan criminal que surge de improviso y que coloca a los protagonistas en lugares inesperados. Todo eso lleva a su vez a dificultades para hallar un tono consistente que lleve adelante el relato: a Liman le cuesta decidirse entre equilibrar el drama con la comedia y su puesta en escena luce sometida frente a los divagues seudo filosóficos del guión de Knight y las sobreactuaciones de Hathaway y Ejiofor.

Recién en su tramo final, cuando la pareja protagónica lleva a cabo el robo, en una ejecución previsiblemente accidentada, Locked down parece encontrar algo de lo que venía proponiéndose. La narración adquiere mucho más dinamismo, hay momentos de tensión y una evolución de los personajes que va de la mano con la aventura del crimen, lo que incluso permite obviar varios cabos sueltos. Eso lleva a que la película termine en una nota mucho más positiva de lo que transmitía la mayoría del metraje. Sin embargo, no alcanza para olvidar que Locked down es un film mayormente anodino, con varios desajustes y bastante por debajo de lo que prometía.

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