No estás en la home
Funcinema

Recapitulación de Better call Saul: Piñata

Por Mex Faliero

(@mexfaliero)

Atención: se revelan detalles del capítulo.

La cuarta temporada de Better call Saul avanza más ladina que de costumbre. Serie que nos habituó a eso de quebrar cualquier tipo de expectativa, la explosión que imaginamos tras la muerte de Chuck McGill se está dando, pero de manera pausada y eso nos envuelve en un clima enrarecido. Piñata, el sexto episodio, profundizó en el camino de Jimmy McGill hacia Saul Goodman, aunque todavía hay lazos que lo mantienen del lado de la luz… pero no por mucho tiempo: Kim le comunicó que tomará otro rumbo en su carrera, lejos de la sociedad Wexler-McGill que Jimmy imaginó, y ese pequeño momento fue un quiebre emocional que parece terminar de decidir al abogado sobre cuál es su vereda.

En Piñata, capítulo que contó con Andrew Stanton (el talentoso hombre de Pixar, director de WALL-E, Buscando a Nemo y Buscando a Dory) en la dirección , las acciones volvieron a estar lideradas por Jimmy. Los títulos de los capítulos de esta temporada parecen esconder múltiples resonancias, las cuales se resuelven en los últimos tramos, como ocurrió con Breathe. Y esa resolución suele ser bastante explícita y física: aquí la piñata, ese globo relleno de dulces que los chicos explotan en los cumpleaños, es una síntesis de todo aquello que saldrá a la luz una vez que estallen los conflictos, pero también una representación del castigo con que Jimmy adoctrina a los matoncitos que lo golpearon en el capítulo anterior. Es en esos momentos cuando Better call Saul logra su rara simbiosis con Breaking bad, o tal vez donde se observan los rasgos autorales de Vince Gilligan y Peter Gould, con la fascinación que generan los buenos ciudadanos capaces de las peores acciones: James McGill y Walter White son dos ejemplos de ambigüedad moral y ética dudosa, pero también de su notable poder de decisión para avanzar en consecuencia.

Habrá que ver de qué manera la línea narrativa de Mike se termina uniendo a la de Jimmy, pero ese parece ser el destino del abogado una vez que termine de quemar sus puentes con Kim y con Howard Hamil, con quien mantuvo otro reencuentro incendiario. Mientras tanto, Mike sigue con sus metodismo habitual en una subtrama que parece estar exclusivamente para atar cabos con Breaking bad, pero también para mostrar el profesionalismo y pragmatismo del hombre de confianza de Gus Fring. Y ya que hablamos de Fring, su monólogo frente al cuerpo inerte de Héctor Salamanca en el hospital fue uno de los grandes momentos del capítulo, y una demostración de que Giancarlo Eposito encontró el personaje de su vida.

Piñata fue un capítulo que estuvo un poco por detrás del anterior, aunque es indudable que se trata de una serie con la vara muy alta: no sólo logra fascinar con cada diálogo y cada situación, sino también transmite un aura de pesadumbre y tristeza, de situación terminal, que no es ni más ni menos que la sensación que habita en el espíritu de cada personaje.

Comentarios

comentarios

Comments are closed.