Me tenés podrido, Barragán

Por Rodrigo Seijas

Estimado Carlos:

Estuve leyendo la nota que publicaste en Miradas al Sur, donde le decís a Ernesto Tenembaum que te tiene podrido. Envié un mail a la casilla indicada en tu nota, pero no obtuve respuesta, así que doy el siguiente paso y me dirijo a vos en forma un poco más pública.

Tenés todo tu derecho a decirle lo que le decís a Tenembaum, un periodista que antes me gustaba más, pero que creo que recientemente perdió buena parte del equilibrio que me atraía de él. Tampoco me parece del todo apropiado como se pliega a la teoría de la ambigüedad de las personas, porque eso tiene su lado peligroso. Igual, me sigue pareciendo un periodista respetable, mucho más que el resto de los antikirchneristas, básicamente porque creo que él, a pesar de sus equivocaciones, sigue siendo de centroizquierda. Pero igual, no es Tenembaum el centro de esta carta. De lo que quiero hablar es de vos, Carlos.

Porque vos, Carlos, me tenés podrido a mí, Rodrigo Martín Seijas. Me tenés podrido porque vos, como buena parte del kirchnerismo, utilizan los mismos procedimientos discursivos que la derecha.

Porque ustedes, en 678, muestran imágenes de Mauricio Macri, condenándolo por utilizar en su favor la reapertura del Teatro Colón, pero luego la muestran a la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner (en uno de sus pocos errores durante los festejos del Bicentenario), poniéndose muy contenta un sombrerito con la leyenda “Kirchner 2011”. ¡Está mal eso también, Carlos! ¡No se puede hacer de un acto patriótico un acto electoral, haciendo propaganda de un candidato! ¡Es poco ético, inmoral y completamente fuera de tono! ¡Y encima, ustedes lo muestran como si fuera algo piola, con música de Baglietto de fondo! ¡Se contradicen en un par de imágenes! Sin embargo, eso es sólo una muestra.

Porque le cantás, muy graciosamente, cancioncitas a Pino Solanas, diciéndole “Pino, volvé”. ¿Adónde tiene que volver Pino? ¿Al kirchnerismo? ¿Al centroizquierda? Tu discurso es tan vacuo, tan vacío, que sólo funciona como bromita estudiantil. No brindas un contenido apropiado y reflexivo en ningún momento.

Porque también me pudren otras cositas más de vos y la gente de 678, el programa donde nos dicen que vivimos en la Argentina, el país de las maravillas, donde todo anda bien, donde todo son buenas noticias, donde no pasa nada malo, donde no hay nada que criticar.

Porque representas…

A los que nos quieren vender que con la asignación universal se acabó la pobreza. Sí, claro, como no.

A los que nos dicen que la inflación es de menos del 10 por ciento anual.

A los que afirman que con la Ley de Medios va a haber una total pluralidad y libertad, mientras siguen aliándose con Hadad, Moneta o Aldrey Iglesias.

A los que se declaran enemigos acérrimos de Clarín, pero en su momento les dieron la fusión de Cablevisión y Multicanal en bandeja.

A los que, luego de hacerse los malos con la Mesa de Enlace, terminaron negociando e ignorando a los movimientos campesinos cooperativos ya que, claro, no se podían dejar de lado las regalías de las retenciones;

A los que se golpean el pecho gritando “¡Honestidad!”, “¡Ética!”, “¡Moral!”, “¡Progresismo!”, pero tienen a De Vido, a Jaime, a Aníbal Fernández y a un patrimonio que se multiplicó muchas, pero muchas veces.

A los que se enuncian como un “movimiento nacional y popular”, pero se apoyan en los barones del Conurbano, en inútiles como Gustavo Pulti o Daniel Scioli, en caraduras como Capitanich, o hacen de cuenta que nunca tuvieron como aliados a Felipe Solá, Reutemann o Cobos.

A los que ponen un cartel de “política de derechos humanos” bien grandecito, pero no tocan las estructuras represivas de las policías Federal y Bonaerense, patotean a gente que sale a protestarles en la Plaza de Mayo o en el Hospital Francés, y le ponen plata a los barrabravas.

Me tenés podrido con eso de que el gobierno le paga a los médicos, maestros, periodistas, etcétera. ¡Como si eso fuera un logro maravilloso! ¡Están haciendo, a lo sumo, lo que corresponde! ¡Es lo mínimo que tienen que hacer! Y lo mismo se podría decir con respecto a su supuesta política de no reprimir. Lo mínimo que se le exige a un gobierno democrático es que no reprima salvajemente. Si Menem, Alfonsín, De la Rúa, Duhalde lo hicieron, problema de ellos. Pero no es ningún mérito para los Kirchner. Es lo mínimo que tienen que hacer. ¡Sólo hacen lo que corresponde!

Vos me tenés podrido Carlos, porque te ponés en un lugar superior a Tenenbaum, como si nunca hubieras tenido nada que ver con el grupo Clarín. ¿No trabajaste en Mitre durante unos cuantos años? Decime, cuando salías en la radio, ¿no pedías que no olvidaran a los verdaderos padres de Marcela y Felipe? ¿Pedías justicia por Kosteki y Santillán? ¿Condenabas el accionar de Julio Blank como editor de Clarín, que decía que la crisis había causado las muertes de los dos piqueteros? ¿Denunciabas las operaciones monopólicas que ya sucedían en el 2006? Ah no, estabas siendo entrevistado por el diario monopólico Clarín, y salía una nota muy linda llamada “La pluma y la palabra de un osado”, con fecha del 17 de mayo del 2006.

Me tenés podrido Carlos, porque ¿sabés qué? Hay también un “archivo demoledor” para vos. Para mí, el problema no pasa porque hayas trabajado para el grupo Clarín. Supongo que te dedicabas a hacer radio y nada más. Pero eras un comunicador, tenías derechos y deberes, una responsabilidad determinada. Contribuiste, en cierta forma, al enriquecimiento y poderío de un grupo mediático nefasto. Y NO TE HACÉS CARGO. Si vas a empezar a olisquear el trasero de todos los demás, a ver si huele a caca, más vale que el tuyo huela a rosas, a perfume de última generación. Hay que tener autoridad moral para tirarle por la cabeza con el pasado o el presente a otra persona. Eso se puede hacer si uno tiene una historia prístina e impecable, o si acepta los errores de su pasado, haciéndose cargo. Vos no hiciste ni una cosa ni la otra. Pero seguís por ahí, hablando a los gritos, inflando el pecho, componiendo cancioncitas, porque total, el aire es gratis. Y ojo, es gratis, es una democracia esto, pero cuando uno habla, cuando uno tira un pelotazo, la pelota siempre vuelve.

Me tenés podrido entonces, Barragán, porque si uno es progresista, pero progresista en serio, lo es desde el principio hasta el final, no para ciertas cosas o en determinados momentos. Y vos, y la gran mayoría de los kirchneristas, lo son cuando les conviene.

Entonces te digo que me tenés podrido Carlos. Y también te pido que me hagas el favor de contestarme algo. Te escribí antes y no contestás. Debe ser que te gusta contestar los elogios o las críticas fáciles. Pero yo no soy un blanco tan fácil. No le debo nada a nadie. No trabajé para Clarín, ni para La Nación, tampoco para Radio Nacional, ni para Canal Siete. Ni siquiera he militado en ningún partido. Soy un tipo del montón, que labura como puede, desde el llano, y que cree que las grandes cosas se pueden hacer de a poquito, desde pequeños gestos y acciones, pero siendo coherente hasta el final, y aceptando las propias incoherencias, los errores propios, para así poder hincapié en los ajenos. Porque trato de ser equilibrado, pero estoy harto de que si uno le elogia algo al kirchnerismo, es un vendido al oficialismo, y si uno le critica algo a los K, le está haciendo el juego a la derecha. Porque creo que ustedes (y en eso te incluyo a vos, tus compañeros de 678 o a Página/12) y el matrimonio K, son tan responsables como la oposición, el grupo Clarín o los periodistas operadores como Mariano Grondona, de esta situación de desequilibrio absoluto en el debate político.

¡Quiero un debate serio, Barragán! ¡Por eso me tenés podrido!

Pero como creo que podés madurar, te escribo esto. Y por eso espero tu respuesta

Saludos

Rodrigo Seijas

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