La española Tu boca en los cielos se llevó el galardón a la mejor película. En tanto, Sangre no es agua, de Divina Gloria y Cecilia Menis, obtuvo el premio del público.
El film de Jonas Åkerlund aborda libremente hechos muy particulares y los narra con gran creatividad e imaginación, contando de paso con una muy buena actuación de Rory Culkin.
La secuela de La ola, el film noruego que marcó una diferencia en el cine catástrofe no mainstream, no iguala a su predecesora pero tampoco deja de convertirse en una opción al menos interesante.
Interesante comedia que desde la simpleza y con herramientas nobles, cuenta los dilemas sociales, culturales y políticos que atraviesan a la sociedad palestina.
Este film colombiano aborda la Cuba de los noventa con un relato tan dramático como romántico, en el que la bajada de línea política es lo que termina jugando en contra.