Con una gran actuación de Cate Blanchett, el director Todd Field construye una interesante reflexión sobre la cancelación, que lamentablemente pierde fuerza a medida que avanza.
El film de Céline Sciamma muestra inteligencia en unas cuantas decisiones de puesta en escena y dos protagonistas potentes, aunque cae en varias manipulaciones en función de la ideología que quiere transmitir.