Título original: Retribution
Origen: Francia-Alemania-España-EE.UU.
Dirección: Nimród Antal
Guión: Christopher Salmanpour, basado en el film de Alberto Marini
Intérpretes: Liam Neeson, Jack Champion, Embeth Davidtz, Matthew Modine, Arian Moayed, Emily Kusche, Lilly Aspell, Noma Dumezweni, Jerry Kwarteng, Christian Koerner
Fotografía: Flavio Martínez Labiano
Montaje: Steve Mirkovich
Música: Harry Gregson-Williams
Duración: 91 minutos
Año: 2023
6 puntos
UNA REMAKE CON LIAM NEESON
Por Mex Faliero
Si no conté mal, esta es la tercera remake de El desconocido, la película española de 2015 dirigida por Dani de la Torre y con Luis Tosar en el protagónico. De hecho, es la segunda que se estrena en cines argentinos luego de que en noviembre del año pasado llegara a los cines la discreta versión surcoreana Amenaza explosiva. ¿Qué ha vuelto a esta película un producto suculento para ser explotado en diversos países? Básicamente es una película de premisa, un material tan impersonal que puede funcionar en España, Alemania, Corea del Sur o el país que se quiera ubicar la acción. Claro que Contrarreloj tiene sus peculiaridades de producción, ya que tiene capitales de Francia, Alemania, España y Estados Unidos, aunque es en apariencia una película norteamericana con sus estrellas de Hollywood en los roles principales pero filmada en Alemania. Una ensalada que sale apenas bien parada porque llevando las riendas está Liam Neeson, y el actor ha construido una iconografía en relatos de acción que vuelven al menos sólido cualquier producto en el que aparezca, por más mediocre que sea.
Y Contrarreloj, dirigida por Nimród Antal, es una película decididamente mediocre, llena de situaciones inverosímiles y vueltas de guión que son volantazos bruscos para intentar sorprender al espectador, aunque a los diez minutos uno ya sepa cómo termina todo, y no necesariamente porque vio alguna de las versiones anteriores. En Contrarreloj tenemos nuevamente al empresario de las finanzas que tiene que llevar, a regañadientes, a sus hijos al colegio, para desayunarse que le han puesto una bomba bajo el asiento del auto y que cualquier maniobra que haga para intentar sacarse el problema del medio, lo hará volar por los aires. La premisa es, entonces, cómo sostener la tensión en ese único espacio del auto, mientras el protagonista maneja por las calles de (aquí) Berlín e intenta descubrir por qué lo chantajean de la manera que lo chantajean. Como suele ocurrir con estos thrillers de premisa, hay un subtexto moralista que pone al personaje contra las cuerdas y el viaje será entonces darle la posibilidad de convertirse en mejor persona, un mejor padre y esposo como sucede en este caso.
Si bien en una remake siempre existe el problema de la falta de sorpresa y la necesidad de encontrar vueltas de tuerca que resulten novedosas, cosa que Contrarreloj hace sobre todo de mitad de relato en adelante, la película se convence (y convence por momentos al espectador) de que también influyen los elementos con que se edifica la reescritura. Y para el film de Antal la presencia de Neeson es suficiente como para que se genere la sorpresa y la tensión. Luego de una extensa trayectoria, el actor encontró en los últimos 15 años un personaje de héroe maduro en películas de acción, policiales y thrillers. Claro, le sobran las condiciones interpretativas para darle solidez y volver verosímil la experiencia para el espectador. Uno sabe más o menos con qué clase de personaje se encuentra, un tipo medio frágil y con sus culpas sobre la espalda, pero que no deja de ser un héroe a su pesar. Y allí va, como en este caso, manejando un auto mientras intenta no sólo salvarse de morir en una explosión sino básicamente de dejar de ser un reverendo hijo de puta. Hay algo cinematográfico que resulta abstracto de explicar, y que Neeson le da a la superficie del relato, y que hace llevadera una película que en esta ocasión integra el melodrama familiar sin caer en excesos, más allá de unos horribles inserts en la última secuencia.
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