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Segundas oportunidades (y los riesgos del multiverso)

Por Patricio Beltrami

(@Pato_Beltrami)

Este artículo contiene spoilers de Spiderman: lejos de casa.

Varios factores incidieron para que la corta saga The Amazing Spider-Man (2012-2014) tuviera un final abrupto: Andrew Garfield no estuvo a la altura de las expectativas, sobre todo en relación a su antecesor, Tobey Maguire; el cambalache de personajes, conflictos y subtramas que derivaron en el fracaso de la secuela (2014); o la inclusión de Spiderman en el ya consolidado Universo Cinematográfico Marvel (MCU), junto a la elección de Tom Holland para renovar (y limpiar) la imagen del más emblemático superhéroe del estudio. Sin embargo, uno de los mayores problemas que sufrieron ambas películas fueron los villanos, que oscilaron entre sosos (Lagarto), fallidos (Duende Verde) o innecesarios (Rhino).

En este marco, Electro fue la peor de las representaciones de un enemigo de Peter Parker en la pantalla grande, y seguramente una de las interpretaciones más deslucidas en la carrera de Jamie Foxx. A pesar de haber sido incluido en el título del film (El sorprendente Hombre Araña 2: La amenaza de Electro), Electro quedó relegado detrás del verdadero villano de la historia: el Duende Verde (Dane DeHaan). Como si todo esto no fuera suficiente, la versión CGI azul, que obtuvo un amplio rechazo, terminó por redondear la lamentable presencia en la película. Sin embargo, el multiverso da segundas oportunidades.

Días atrás trascendió que Foxx se encuentra en tratativas para retomar su antiguo rol en la tercera parte de Spiderman. De esta manera, seguirá los pasos de J.K. Simmons, quien retomó el rol de J. Jonah Jameson con un cameo en la última escena de Spiderman: lejos de casa. Ante ello, Marvel no presentó una réplica exacta del personaje, quien fue uno de los mejores de la saga dirigida por Sam Raimi, sino que consistió de una reversión, aggiornada al periodismo digital y las fake news. Con este antecedente, probablemente el villano presente diferencias sustanciales en comparación a la caracterización de 2014. Incluso, Foxx ya adelantó un dato que generó alivio entre los espectadores: Electro no volverá a ser azul.

Hasta el momento se desconocen los motivos para justificar la vuelta de ambos actores y sus correspondientes personajes. El tiempo dirá si estas decisiones tienen real sustento para la historia o si se trata de una de las tantas concesiones a las que Marvel debió acceder el año pasado para asegurarse la continuidad de Spiderman en, por lo menos, otras dos películas del MCU. Si bien Miles Morales ha ganado muchísimo terreno y popularidad durante los últimos años, sobre todo con el impulso de Spider-Man: un nuevo universo, Peter Parker es la versión más reconocida del superhéroe. Por ese motivo, Sony considera que solo a través de su presencia puede consolidar su propio spiderverso.

Sabiendo que el principal activo se encontraba comprometido con Marvel, Sony lanzó su propio universo en 2018 con Venom. Este año deberían haberse estrenado Morbius y Venom: let there be carnage, pero la pandemia arruinó los planes de expansión, por lo menos, hasta 2021. A priori, estas tres películas representan la base del proyecto que llegará a las salas durante los próximos años, que incluso ya tiene otras producciones en desarrollo, como Madame web o Kraven, el cazador. Sin embargo, todo parece indicar que, a instancias de la maquinaria Disney-Marvel, Sony apunta a que la presencia de héroes o villanos del spiderverso en la tercera película de la saga Spiderman pueda brindarle impulso y una mayor popularidad a los personajes sobre los que ostenta el 100% de los derechos.

El desarrollo del multiverso es el próximo paso que darán los tres estudios más importantes que están implicados en el género. DC adelantó que seguirá este camino con The Flash, mientras que Marvel lo encarará a partir de Wandavision, Doctor Strange and the multiverse of madness y Loki. En este marco, el cierre de la trilogía Spiderman podría implicar no solo a personajes del actual universo Sony, sino que también recurriría a figuras provenientes de universos pasados, como Electro. Más allá de esta decisión artística, existe vida más allá de (la tradicional versión de) Peter Parker. Particularmente, la magnífica Spider-Man: un nuevo universo, que tiene secuela en desarrollo, es la prueba más confiable sobre las posibilidades que existen para encarnar al héroe arácnido en el futuro. En lugar de seguir regalando segundas oportunidades y exponerse a riesgos innecesarios, Sony debería recurrir a la extensa, diversa e interesantísima galería de personajes e historias que tiene a disposición.

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