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Yanka y el espíritu del volcán

Título original: Idem
Origen: Argentina
Dirección: Iván Abello
Guión: Fernando Regueira, Julieta Ledesma, Iván Abello
Intérpretes: Iván Abello, Hugo Arana, Lucia Arroyo, Laura Azcurra, Chela Cardalda, Martín Conti, Leto Dugatkin, Enrique Dumont, Manuel Faillace, Maite Lanata, Juan Palomino, Gastón Pauls, Marcelo Peralta, Florencia Rosemblit
Fotografía: Matías Nicolás
Montaje: Pablo Barbieri Carrera
Música: Ruy Folguera
Duración: 85 minutos
Año: 2018


7 puntos


UNA DE AVENTURAS

Por Mary Putruelli

(@funcinemamdq)

En todas las culturas, en cada aventura emprendida, la figura del héroe se impone por antonomasia, siendo la figura principal que lleva sobre sus hombros toda la acción que transcurre, ya sea en pantalla o en las hojas de algún escrito.

En su libro El hombre de las mil caras, el escritor Joseph Campell profundizó en el mito del héroe, encontrando siempre una estructura similar en el camino que este recorría. En su inicio dentro del llamado “mundo ordinario” donde el héroe se siente cómodo, luego llega la llamada para salir “en búsqueda de” el rechazo de esa llamada, el encuentro con algún mentor o fuerza que lo guía y ayuda, el cruce al umbral, que dependiendo el género donde estemos parados implica el cruce hacia un mundo especial, mágico, singular; el encuentro con amigos y enemigos que son parte infaltable de ese viaje, el acercamiento al momento crítico o de quiebre en la historia, lo que se conoce como prueba decisiva para dar lugar a la ansiada recompensa, para volver a tomar el camino de regreso, ya en un estado de iluminación y aprendizaje más elevado.

En Yanka y el espíritu del volcán la encargada de llevar a cabo tal peripecia es la actriz juvenil del momento Maite Lanata (quien actualmente brilla en su papel de Juan en la tira Cien días para enamorarse). Maite filmó Yanka… cuatro años atrás, dejando expuesto en pantalla la calidad actoral que lleva impregnada en sí. Aquí interpreta a la niña del título, que vive retraída desde la pérdida de su madre, un hecho no muy claro que deja la duda en ella respecto a si realmente su madre ha muerto o ha desaparecido. El día que su padre decide casarse nuevamente, Yanka emprende el camino de búsqueda de su madre, convirtiéndose este en un recorrido, donde se encontrará con su propia identidad. De descendencia mapuche, como su nombre lo indica, no parece estar conectada por ningún otro lazo con dicha cultura, sin embargo el bosque y sus criaturas la esperan con una revelación sobre quién es ella y cuál fue el destino de su madre.

El guión, con una escritura que llegó al número total de diecisiete, fluye entre la estructura del género de aventuras fantásticas en un contexto poderoso sobre la cultura mapuche y la importancia de las tradiciones y leyendas naturales, allí aparece la figura imponente de Pillán, Dios del Fuego, quien inicialmente se presenta como el villano, pero que el devenir de la historia lo ubicará en un mejor lugar. Mucho del trabajo intenso que se realizó sobre el guión tiene que ver con el desarrollo de los efectos visuales, los cuales funcionan perfecto en lo que la historia demanda, y aseguran un efectivo primer escalón en materia de efectos para lo que el cine nacional nos tiene acostumbrados, que debe decirse no es mucho.

Las actuaciones de todo el elenco son correctas y el tono que encuentra Maite Lanata para esa niña que vive enojada y necesitada, es lo mejor que nos ofrece Yanka y el espíritu del volcán, junto con una propuesta propia de nuestra historia que encontrará en el público infantil un buen recibimiento.

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