-DOLAN. Para algunos un joven maravilla, para otros un tipo bastante irritante y demasiado creído de sí, el canadiense Xavier Dolan presentó este miércoles su nuevo film Juste la fin du monde, con un seleccionado de intérpretes franceses como Lea Seydoux, Marion Cotillard, Vincent Cassel, Nathalie Baye. El joven realizador se mete esta vez con el subgénero de dramas sobre reuniones familiares, adaptación de una obra de teatro francesa de los años 90’s. Si la película mayormente no convención, en parte se debió a la forma poco cinematográfica con la que Dolan registra el encuentro de sus personajes, pero más aún por lo hiperbólico de las situaciones de las discusiones que se generan. Ni siquiera sus actores parecen estar bien en lo que sería uno de los grandes fracasos de la competencia oficial.
-DARDENNE. Otros que parecen no haber ganado el visto bueno de la mayoría de la prensa que cubre el festival son los hermanos belgas Jean Pierre y Luc Dardenne, quienes presentaron a competencia La fille inconnue. En el film Adèle Haenel interpreta a una doctora que mientras espera ingresar en una clínica privada, reemplaza a un doctor en un consultorio y atiende a gente de bajos recursos. Pero una noche decide no atender a una chica, y al otro día se entera que apareció muerta en el río. De repente, el drama social se convierte en una suerte de policial con la doctora, carcomida por la culpa, investigando quién era esa joven. Lo que se ha dicho es que si bien no ofrece ningún tipo de novedad en relación al cine anterior de los hermanos, que ya tiene demasiado imitadores y parecer estar un poco agotado, encima carece de la tensión de sus primeras obras, algo que ya se podía ver en su anterior Dos días, una noche.