Siete días de cine en la TV: Carpenter, Antin, Stone, Truffaut

Por Rodrigo Seijas y Mex Faliero

(@fancinemamdq)

-Lunes 14, a las 22:00 por TCM, El príncipe de las tinieblas. Segunda entrega en la Trilogía del Apocalipsis de John Carpenter -que se completa con La cosa (1982) y En la boca del miedo (1994)-, este film de 1987 fue realizado por el cineasta en forma independiente, debido a las frustraciones que arrastraba tras diversos trabajos con los estudios. Lo cierto es que, a pesar de no ser tan recordado dentro de su filmografía, es claramente representativo de su estilo, gracias a su narración pausada, su progresiva creación de climas inquietantes y el aprovechamiento al máximo tanto del fuera de campo como de la profundidad dentro del encuadre. Sin llegar a las cimas de Halloween (1978) o La niebla (1980), es de esas películas que inevitablemente dejan al espectador con una particular sensación de inquietud e incertidumbre.

-Martes 15, a las 14:00 por INCAA TV, Circe. El director Manuel Antin trabajó en primera instancia con el propio Julio Cortázar esta adaptación del cuento del propio escritor, luego la colaboración se haría a la distancia y tomaría nuevos rumbos. Con actuaciones de Graciela Borges, Alberto Argibay, Walter Vidarte y Sergio Renán, es la historia de la mujer a la que se le han muerto dos novios y donde un tercero, decidido, quiere romper la coraza que ella ha construido a su alrededor. No muy bien recibida en su momento, la película ha logrado ganar con el tiempo consideración crítica, especialmente al observarse cómo el estilo del escritor se apodera de alguna forma del rebuscado refinamiento narrativo del realizador. Circe funciona, también, como una metáfora de la Argentina de ese entonces. Tal vez también la de hoy.

-Miércoles 16, a las 12:25 por Fox Classics, Marruecos. Con un elenco de notables -Marlene Dietrich, Gary Cooper, Adolphe Menjou- el director Josef von Sternberg llevó a la pantalla esta historia que no sólo reafirma su gran conocimiento en la construcción de imágenes imponentes y de narrador consumado, sino que además lo mostraba como un moderno cineasta que se adelantaba a muchos de sus pares en la utilización sofisticada del sonido, tecnología incipiente por ese entonces. El film en verdad es un drama romántico, que mezcla a una cantante entre el deseo de un pintor y un legionario, pero que además representa lúdicamente cuestiones como la sexualidad, lo masculino y lo femenino. Una gran producción, con especial lucimiento de la Dietrich.

-Jueves 17, a las 11:35 por Space, Empire of dreams: The story of the Star Wars trilogy. Este documental de Edith Becker y Kevin Burns tiene entre una gran cantidad de testimonios, la palabra de George Lucas, Mark Hamill, Harrison Ford y Carrie Fisher. Bueno, más o menos ya se imaginan de qué la va: las estrellas detrás del fenómeno de Star Wars, pero contando no tanto cómo esto es un imperio que recauda millones por año sino de qué manera la película original fue un acto de arrojo y una apuesta independiente que, de alguna forma, reescribió la historia de la cultura popular de los 70’s en adelante. Un análisis exhaustivo de aquel fenómeno, con precisión para destacar lo importante y una cantidad de información absolutamente imperdible para los fanáticos.

-Viernes 18, a las 10:00 por INCAA TV, Harakiri. El gran Masaki Kobayashi y otra de sus historias centradas en aspectos culturales de su tierra. Con actuaciones de Tatsuya Nakadai, Rentarô Mikuni y Akira Ishihama, aquí el director cuenta sobre un samurái que pide permiso para realizarse un harakiri, no sin antes revelar aquello que lo llevó a tomar la trágica decisión. Se trata de un típico film de Kobayashi, con su habitual virtuosismo y elegancia para la puesta en escena, a la vez que resulta un muy crítico retrato de la moralidad y los códigos de un país. Un film tan bello como trágico.

-Sábado 19, a las 14:45 por Fox Classics, Salvador. En el mismo año de Pelotón, Oliver Stone estrenó este film, que pasó desapercibido y que formó parte de todo un subgénero sobre periodistas cubriendo conflictos bélicos, explotado al máximo durante los ochenta. Una película potente en su desarrollo, que mostraba a un cineasta sumamente comprometido con el relato, con una creciente capacidad para vincular los dilemas personales del protagonista con la inestabilidad política que lo rodeaba y un estilo visual -sustentado principalmente en un montaje vigoroso y trepidante- que le otorgaba una gran fisicidad a lo que se narraba. También es un ejemplo de cómo James Woods podía ponerse al servicio de lo que se contaba, en una actuación estupenda.

-Domingo 20, a las 22:00 por Encuentro, Los 400  golpes. Hubo una vez un enorme director, que entregó algunos de los más grandes films del siglo pasado, y lo supo hacer porque nunca se colocó por encima de sus personajes, fue honesto de principio a fin y jamás se olvidó de su infancia, a la que puso al servicio de su cine. Ese director se llamaba François Truffaut y era un genio absoluto, que luego influyó en cineastas de la talla de Steven Spielberg. Acá tenemos su ópera prima -quizás el mejor debut en la historia del cine-, un relato de claras connotaciones autobiográficas, que explora tópicos como lo infantil, la marginalidad, la familia y las instituciones sociales con una pureza, lucidez y sensibilidad apabullantes. Es también el inicio de la legendaria dupla conformada por Truffaut y el actor Jean-Pierre Léaud, y del camino recorrido por ese inolvidable personaje llamado Antoine Doinel. La secuencia final es conmovedora e inigualable.

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