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Contando a mis ex

poster whtas your numberTítulo original: What’s Your Number?
Origen: EE.UU.
Dirección: Mark Mylod
Guión: Gabrielle Allan y Jennifer Crittenden, basados en la novela de Karyn Bosnak
Intérpretes: Anna Faris, Chris Evans, Ari Graynor, Blythe Danner, Ed Begley Jr., Oliver Jackson-Cohen, Heather Burns, Eliza Coupe, Kate Simses, Tika Sumpter, Joel McHale
Fotografía: J. Michael Muro
Montaje: Julie Monroe
Música: Aaron Zigman
Duración: 106 minutos 
Año: 2011
Compañía editoria: Blushine


4 puntos


Hacer comedia no es asunto fácil

Por Gabriel Frenkel

whats your number unoPelículas como Contando a mis ex (editada en el país por Blushine) confirman que la comedia, a pesar del ninguneo de cierta prensa conservadora y de la mayoría del público, no es para nada un género menor  que se hace de taquito, sino que es un tipo de cine muy difícil de realizar y que la clave es que sus ingredientes (el ritmo y la gracia de la historia, la construcción de la psicología de los personajes, la química entre ellos y la identificación del público con los protagonistas, por nombrar algunos) aparezcan de modo natural, casi sin que nos demos cuenta. En este film no sólo faltan varios de estos ingredientes, sino que los pocos que aparecen, lo hacen de modo forzado, llevando a que cruja por todas partes, dando por resultado una película fallida.

Ally Darling (Anna Faris) es una treintañera cuya vida está patas para arriba y que, camino a su casa luego de ser despedida de su trabajo, lee un artículo en una de esas revistas que les hacen creer a las mujeres que deben complacer al resto del mundo para ser felices. La nota en cuestión postula que si una mujer se ha acostado con 20 hombres, sus posibilidades de casarse serán casi nulas. Ally calcula que estuvo con 19 y se da cuenta que si vuelve a tener sexo con un hombre que no sea “el indicado”, arruinará  su existencia para siempre. Decide entonces dejar de tener relaciones y localizar a sus ex para saber si alguno de ellos es la persona con la que compartirá el resto de su vida. Para encontrarlos, contará con la ayuda de Colin (Chris Evans), un vecino que duerme con una chica distinta cada noche, huyendo de cualquier clase de compromiso, pero que poco a poco se irá enamorando de la protagonista.

De aquí en más seremos testigos de los reencuentros de Ally con los hombres que pasaron por su vida y el film, de manera chata y sin fluidez, irá encadenando situaciones escatológicas de las que sólo se pueden rescatar un par de gags (muy buenos los del ginecólogo y la vagina y la discusión acerca de si se considera que hubo penetración o no de acuerdo al tamaño del pene) hasta llegar al previsible final. En la comedia romántica, el  problema no es que el final sea previsible, sino que el camino de los personajes hacia el epílogo sea interesante y divertido, algo que no sucede para nada en Contando a mis ex.

La pobre Anna Faris, quien ya había mostrado sus dotes cómicas en películas como La casa de las conejitas y Una película de miedo, hace lo que puede para sacar a flote este barco que hace agua, y que es un muestrario de estereotipos (la protagonista con vida desastrosa, la hermana perfecta y el mujeriego que se enamora) y de subrayados innecesarios (faltando pocos minutos para terminar no hacía falta que Ally nos grite “soy una zorra desempleada de más de treinta que durmió con 20 tipos”). El cuento de la chica guarra y loser que termina encontrando la felicidad ya se hizo antes y mejor: vean sino Damas en guerra (escudería Apatow: lo mejor de la Nueva Comedia Americana).

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