Por Daniel Cholakian
Con la presencia de su director Pablo Solarz, sus productores y los actores Peto Menahem, Malena Solda, Silvia Kutica y Luis Luque, se presentó la película Juntos para siempre. El realizador habló de los personajes y del tema central de la película, la «desconexión» personal y afectiva de Javier Gross, interpretado por Menahem, y la deriva de tal posición personal en el maltrato hacia el resto de las personas. Pero también hizo referencia a lo que representa para él este rol recién asumido, la dirección, luego de más de 15 años de trabajo como guionista profesional y lo costoso que fue asumir este nuevo lugar, a pesar la larga experiencia en el mundo del cine. Destacó que fue crucial contar con el apoyo de productores experimentados y un «casting soñado» de actores, que hicieron más fácil la experiencia, además de ayudarlo a resolver del mejor modo los desafíos que representó la novedosa tarea para él.
A la hora de hablar del lugar de la comedia en la industria del cine tanto nacional como internacional, Solarz expresó que siente que la comedia está en retracción en el interés del público en este momento, y por lo tanto de la producción industrial. Según su criterio este es el momento del melodrama social, que dominaría el panorama internacional en el interés del público y la crítica. En lo relativo a la comedia nacional, expresó que se encuentra en un momento muy interesante para producir un despegue importante. Estima que tanto actores como técnicos y canales de distribución están en condiciones de llevar adelante tal crecimiento y que tal vez guionistas y realizadores deberían profundizar sus conocimientos y talentos, para hacer de la comedia argentina una realidad más importante.
Entre los actores se hizo evidente la importancia de Menahem, no sólo como protagonista casi excluyente, sino como compañero de ruta de Solarz, puesto que se reconoció amigo personal del director. Durante la rueda de prensa el actor dio muestra cabal del trabajo consciente que ambos hicieron en la construcción de ese personaje pusilánime y por momentos oscuro sobre el que se centra la trama de Juntos para siempre. Sin embargo Menahem destacó que le resultó sencillo interpretar al personaje, pues el trabajo previo con Solarz le permitió conocer profundamente los rincones más oscuros de Javier Gross. Al contrario, Luque señaló que en su caso componer el personaje que es parte de la ficción dentro de la película, fue muy complejo, pues a pesar de estar trabajado con mucha austeridad, la profundidad de la situación que vive y la complejidad de su historia y todo lo que potencialmente podrían significar sus actos y sus secretos, hacen de ese Fabián, un personaje que no tiene techo.
Todos coincidieron en que las mujeres están maltratadas, pues un personaje como el protagonista no puede sino maltratar a quienes lo rodean, pero que la imposibilidad de tomar consciencia e impedir ese maltrato es consecuencia de su propia historia compleja, que las lleva a vincularse con el guionista que interpreta Menahem.