Por Patricio Beltrami
Si bien resulta difícil realizar balances en este contexto, lo cierto es que las producciones de superhéroes han sufrido los mismos perjuicios que el resto de la industria audiovisual a causa de la pandemia. La paralización de grabaciones a fines de marzo y los meses de incertidumbre que se vivieron posteriormente hasta la paulatina reactivación del sector generaron complicaciones y daños cuya real dimensión aún se desconoce. A un año de la aparición del primer caso de COVID-19 en Wuhan, la mayoría de los cines del mundo permanecen cerrados mientras se espera que la campaña de vacunación global avance lenta y progresivamente. Ante este escenario similar a un distopía, y con un poco de viento a favor, probablemente la actividad en las salas no vuelva a normalizarse hasta 2022.
Solo dos largometrajes del género se lanzaron antes de la cuarentena mundial: Aves de presa y Bloodshot. Semanas más tarde, comenzaron a conocerse las primeras reprogramaciones para las películas que ocupaban espacios en los calendarios de 2020 y 2021, con ajustes que incluso llegaron a 2022. Posteriormente, la extensión de la pandemia generó el anuncio de nuevos retrasos. Por este motivo, cuatro películas (Viuda Negra, Morbius, Venom y Eternals) y dos series en streaming (Wandavision, Falcon y el Soldado de Invierno) pasaron a 2021.
Al mismo tiempo, las series de superhéroes sufrieron un cimbronazo con el cierre de dos producciones que iniciaron largos ciclos en televisión. Particularmente, este fenómeno se había iniciado en 2019 con la finalización del convenio Marvel-Netflix. En primer orden, Arrow culminó tras ocho temporadas con el desenlace de la historia de Green Arrow/Oliver Queen. Se trata de la serie que dio origen al Arrowverse, universo televisivo que conforman The Flash, Leyends of tomorrow, Supergirl, Black Lightning y Batwoman. Por su parte, Agentes de SHIELD terminó a mediados de año, concluyendo así las aventuras del equipo liderado por el agente Phil Coulson. Durante sus primeras temporadas, Agentes de SHIELD y Agente Carter mantuvieron estrechos vínculos con las películas del Universo Cinematográfico Marvel (MCU).
En materia de estrenos cinematográficos, el 2020 resultó altamente ingrato. Aves de presa se ubicó en el mismo sendero de Escuadrón Suicida (aunque fue levemente superior, o menos mala), con un relato caótico integrado por personajes y sucesos que siempre se encontraron en función de las necesidades o el lucimiento de Harley Quinn (Margot Robbie). Poco antes del cierre de los cines en todo el planeta, Bloodshot pasó por las salas sin pena ni gloria y quedará en el olvido por superficial e intrascendente. En tanto, a mitad de año terminó la maldición de Los nuevos mutantes, la película de Fox cuyo lanzamiento se había pospuesto cinco veces a lo largo de tres años. A tono con las últimas dos películas de la saga X-Men (Apocalipsis y Dark Phoenix) y más allá de un arranque prometedor, finalmente el film no aportó nada atractivo, ni siquiera desde la introducción de nuevos personajes. Lejos de haber despertado expectativas, representó un cierre deslucido para una franquicia que durante sus veinte años de extensión supo otorgar muy buenas producciones, como X-Men 2, X-Men: Días del futuro pasado o Logan.
Párrafo aparte para Mujer Maravilla 1984, que finalmente se estrenó en buena parte del mundo durante la segunda quincena de diciembre. Particularmente, resultó un nuevo paso atrás en la trayectoria del Universo Extendido DC (DCEU), aunque fue superior a Aves de presa. Con sus exagerados 150 minutos, la película representa un retroceso en relación a Mujer Maravilla, con una historia irrelevante, decisiones arbitrarias o caprichosas (¡la vuelta de Steve Trevor!), conflictos intrascendentes, escenas de acción flojas y una resolución tirada de los pelos. Después de un inicio auspicio en 2017, sin dudas se espera que el binomio Gal Gadot – Patty Jenkins entregue un mejor producto en el futuro cierre de la trilogía.
Más allá de los resultados artísticos, Mujer Maravilla 1984 se convirtió en un hito para la industria, ya que Warner dispuso su lanzamiento simultáneo en salas y HBO Max. Además, el estudio adelantó que todos sus tanques se estrenarán en streaming durante 2021, por lo que The Suicide Squad correrá la misma suerte. Sin embargo, el plato fuerte de la plataforma on-demand será la emisión de la versión Zack Snyder de La Liga de la Justicia, que se dividirá en cuatro capítulos. Si bien se trata de un triunfo para los fans de DC, quienes durante más de dos años reclamaron este corte, lo cierto es que la decisión no habría ocurrido sin la paralización de la industria y la escasez de estrenos para 2021. Mientras diariamente se acentúa la incertidumbre sobre el futuro de la actividad en cines, la consolidación de los servicios de streaming ha sido la principal novedad para garantizar la viabilidad del género en 2020.