Título original: The World’s End
Origen: Inglaterra
Dirección: Edgar Wright
Guión: Simon Pegg, Edgar Wright
Intérpretes: Pierce Brosnan, David Bradley, Michael Smiley, Simon Pegg, Nick Frost, Martin Freeman, Paddy Considine, Eddie Marsan
Fotografía: Bill Pope
Montaje: Paul Machliss
Música: Steven Price
Duración: 109 minutos
Año: 2013
Compañía editora: AVH
7 puntos
El que no salta es argentino
Por Matías Gelpi
Edgar Wright posiblemente sea uno de los directores más sólidos de la actualidad, pero no sólido en el sentido futbolístico, más bien en el artístico y formal. Se ha encargado de guiones simples como Muertos de risa o Arma fatal y también de historias más complejas con Scott Pilgrim vs The World y siempre sale airoso, demostrando que tiene un estilo y una impronta propia que sabe utilizar a favor de lo que pretende contar.
En Bienvenidos al fin del mundo vuelve a trabajar con Simon Pegg y Nick Frost, con la misma estructura argumental de Muertos de risa. Esto es, dos tipos comunes que se enfrentan a una catástrofe para la que, obviamente, no están preparados. Gary King, el personaje de Pegg, al igual que Shaun en Muertos de risa, es un individuo estancado en la vida, incapaz de evolucionar mientras el resto parece seguir adelante. Por supuesto la destrucción del mundo le dará un nuevo significado a su existencia y podrá demostrar su valía. El tema del los seres obtusos y en apariencia insignificantes pero capaces de hacer algo extraordinario, está en todas las películas de Wright. De hecho hasta hace unos días estaba desarrollando la película de Ant-Man, que es básicamente la historia de un tipo común que se convierte en alguien extraordinario, el arquetipo de personaje de Marvel. Sin embargo esta semana se difundió la noticia de que Wright abandonaba el proyecto, lo cual es una lástima ya que seguramente le hubiera aportado al personaje cierta complejidad y no hubiera fallado tampoco en mostrarnos acción.
Pero volviendo a Bienvenidos al fin del mundo, así como Muertos de risa era un homenaje al cine de zombies, particularmente a las películas de George Romero, y Arma fatal era una película de acción que hablaba del cine de acción, aquí Wright y Pegg se proponen homenajear al cine de ciencia ficción basándose particularmente en The body snatchers, novela de Jack Finney que fue adaptada con mucha suerte en tres ocasiones (Don Siegel en 1956, Philip Kaufmann en 1978 y Abel Ferrara en 1993) y con pésima suerte en la última (2007) protagonizada por Daniel Craig y Nicole Kidman.
A pesar de ser un poco repetitiva, Bienvenidos al fin del mundo avanza con buen ritmo y funciona perfecto en todos sus chistes, gracias en parte al buen elenco con el que cuenta, destacando el gran Martin Freeman y la participación de Pierce Brosnan. Luego llegamos al final delirante con una discusión increíble entre una gigantesca voz en off y un Pegg efervescente. Debo confesarlo, Wright es uno de los directores que más me gustan pero Bienvenidos al fin del mundo, al igual que Muertos de risa, está un escalón por debajo de Arma fatal y Scott Pilgrim. Aún así es una buena y disfrutable película.
Por último en Bienvenidos al fin del mundo se nos muestran unos cuantos pubs ingleses, que no son difíciles de imaginar repletos de gente durante el mundial cantando “el que no salta es argentino”. Un poco nos lo merecemos, por nacionalistas berretas y por no hacer películas como esta.