La nueva película del uruguayo Carlos Ameglio es una comedia que recurre mucho más a lo verbal que lo físico, pero con las dosis justas como para no caer en el subrayado.
Alvaro Brechner confirma su talento en su segunda película luego de Mal día para pescar, un film que mezcla géneros y tiene una pátina agridulce que enmarca su anécdota.