Esta comedia negra ambientada en el mundo de la televisión tiene algunas ideas visuales, pero acumula demasiados personajes cínicos y resuelve todo de manera incongruente.
Es la segunda película de Maxi Gutiérrez. En el film, él intepreta a un pianista y ella a una mujer que intenta escapar del pasado. Ambos se encontrarán en la barra de un bar.