La obra escrita por Mariano Saba y dirigida por Analía Mayta delinea con gran fluidez el movimiento constante que acecha desde afuera y las miserias de los núcleos familiares.
La obra escrita y protagonizada por Lucía Steimberg es un ejemplo logrado de una crueldad desconcertante e impactante como vía esencial para despertar al espectador.