Título original: Wonder Wheel
Origen: EE.UU.
Dirección: Woody Allen
Guión: Woody Allen
Intérpretes: Kate Winslet, Justin Timberlake, Juno Temple, James Belushi, Max Casella, Michael Zegarski, Tony Sirico, Marko Caka, Jack Gore, Dominic Albano, Evin Cross, Debi Mazar
Fotografía: Vittorio Storaro
Montaje: Alisa Lepselter
Diseño de producción: Santo Loquasto
Duración: 101 minutos
Año: 2017
8 puntos
WOODY ALLEN EN SU MEJOR VERSIÓN
Por María Putrueli
La rueda de la maravilla es, en sí misma, Woody Allen; una rueda que encuentra su vuelta número cuarenta y siete (la cantidad de películas que lleva realizadas el creador de clásicos como Annie Hall, Hanna y sus hermanas, Crímenes y pecados y tantas más) y que parece nunca dejar de girar. Y es menester decirlo, Allen filma de maravillas, puede que las historias que nos presente varíen en calidad técnica, dramática e incluso algunas hayan llegado a calificarse como bodrios, pero este pequeño gran director es la definición misma del cine en su estado más genuino.
En esta oportunidad vuelve a formar dupla con el exquisito director de fotografía italiano Vittorio Storaro (Apocalypse Now), para entregar una película con un trabajo de arte inolvidable. El detalle cuidado no sólo en lo que refiere al vestuario y a la adaptación de época, sino en el manejo de luces, de los contrastes y saturaciones acorde a cada estado de ánimo de estos personajes que parecen asfixiados en la historia, resultan una grata sorpresa en la vasta filmografía que lleva recorrida Allen.
Se sabe, el director tiene el don para conformar el reparto perfecto para cada película, encontrando incluso actores que ya pueden reconocerse como fetiches de su cine. Pero aquí, y es posiblemente el punto más interesante de esta rueda maravillosa, la composición que realiza Kate Winslet es magistral, incluso la actriz ha declarado que componer este personaje ha sido de lo más estresante para ella. Sin embargo el resultado es una de las mejores interpretaciones de su carrera.
El argumento es bastante simple, una familia rota compuesta por la madre Ginny (Winslet), una mujer de cuarenta años atrapada en una rutina agobiante con los sueños frustrados de convertirse en una actriz famosa; Humpty, un marido común (Belushi) con pocos objetivos en la vida, más que salir de pesca con sus amigos, y el hijo de Ginny, un niño con varios problemas piromaníacos que aportan las pocas sonrisas que genera el relato. El conflicto se desata en dos direcciones, cuando el guardavidas (Justin Timberlake) de las playas de Coney Island, emblemático sitio donde se desarrolla la trama, llega a la vida de Ginny para mostrarle todo aquello que ella tanto anhela y cuando la hija de Humpty busca refugio en la casa de su padre, ya que la persigue su marido mafioso.
Desde allí todo gira entre el tono romántico de época, las frustraciones continuas a las que subyacen los protagonistas, un clima por momentos policial y una resolución de la trama clásica del gran Woody Allen, quien vuelve en esta propuesta a su mejor versión.