Con el premio principal al cortometraje Luminaris, de Juan Pablo Zaramella, terminó el pasado domingo la cuarta edición de Maipú Cortos, el festival internacional de cine de humor, uno de los cuatro que se realizan en el mundo y único en la Argentina. El más reconocido de los animadores argentinos fue el gran ganador.
Luminaris se quedó con el primer premio y el premio del público de la competencia argentina. En la misma sección el segundo premio fue para El chileno, de Max Gianetto y Esteban Cánepa, mientras que hubo menciones para El gran pequeño, de Maxi Bearzi, y Pirolisios aguda, de Víctor Daniel Duche.
En cuanto a la competencia internacional, el primer premio fue para la española Los 4 McNifikos, de Tucker Dávila Wood, mientras que el segundo galardón fue para la también española Nadie tiene la culpa, de Esteban Crespo. Las menciones fueron para Independencia, de Felipe Vara del Rey, y La gran carrera, de Kote Camacho, ambos españoles.
Entre los nuevos directores, la mención especial fue para Casting, de Damián Dionisio, a la vez que como mejor corto maipuense fue elegido Desliz, de Nahuel Kees.
La cuarta edición del festival proyectó 100 cortometrajes de México, España, Colombia, Estados Unidos, Ecuador, Venezuela, Italia, País Vasco, y de Argentina, contándose con la presencia de casi 70 directores, actores, productores y distribuidores de cortometrajes.
Entre los hechos destacados hay que mencionar lo que ocurrió durante el acto inaugural con la apertura del Espacio INCAA Kilómetro 275, mediante el cual vuelve el cine con continuidad a Maipú luego de 24 años de ausencia.