El músico participó en la premiere mundial del film The Promise: The Making of Darkness on the Edge of Town, y fue entrevistado en una charla pública por su amigo Edward Norton ante 500 fanáticos.
El recién estrenado edificio Bell Lightbox, nueva sede del Festival de Toronto, fue el escenario de una velada que unió a fanáticos de la música y a amantes del cine. Frente a una audiencia de unas 500 personas, que comenzaron a hacer fila hasta tres horas antes del evento, Bruce Springsteen y el actor Edward Norton conversaron durante una hora sobre los detalles del nuevo documental The Promise: The Making of Darkness on the Edge of Town, que tuvo su estreno mundial en la muestra.
La película, dirigida por Thom Zimny, combina secuencias capturadas en el estudio a fines de los años setenta con entrevistas actuales para explorar el tortuoso proceso detrás de la grabación del clásico de 1978 Darkness on the Edge of Town.
Norton, que parecía el más fiel de los fans, vestido con camisa y jeans negros igual que su ídolo, comenzó la sesión un poco nervioso y titubeante. «Si tratara de describir lo que la música de Bruce Springsteen ha significado para mí y cómo ha inspirado mi propio trabajo creativo, tomaría demasiado tiempo y me faltarían las palabras para decir algo que seguramente todos en esta sala sienten», dijo el intérprete, quien es amigo de Springsteen desde hace once años.
La audiencia recibió a The Boss de pie y con emocionados gritos y aplausos. Con un tono relajado y alegre, Springsteen se enfrascó en una amena discusión que abarcó música, política, cine y los Estados Unidos, entre otros temas, mientras Norton le hacía preguntas que tenía anotadas en un papel.
Sobre el disco, el cantante dijo que fue el comienzo de una larga conversación que mantiene con sus seguidores, y que fue «tallado a partir de una piedra en bruto» de unas setenta canciones. «Surgió de una fuerte dosis de ego, ambición y ansias, por las razones correctas, espero. Darkness on the Edge of Town era un disco cargado de enojo. Tomé las canciones más rudas que tenía», recordó.
También contó que con su grupo, E Street Band, trabajaron en ese disco durante un año, enfocando completamente sus vidas en la música, y que se deshicieron de canciones a las que habían dedicado varios días. «Quería entretener, quería el Cadillac rosado, quería chicas. Pero más que eso, quería lo que más necesitaba: un propósito para mi trabajo. Y eso éramos, un grupo de tipos en busca de un propósito,» dijo.
Cerca del final, Norton le preguntó qué otros discos elegiría para hacer una película. El cantante mencionó Pet Sounds, de los Beach Boys, Highway 61, de Bob Dylan y Let it Be, de los Beatles.
«Es interesante ver cómo otra gente hace su trabajo, porque a nosotros nos costó tanto, que siempre sentimos que lo estábamos haciendo mal. Pero ahora miro hacia atrás y me digo, simplemente lo estábamos haciendo de la única forma que sabíamos», concluyó.
El documental será transmitido por HBO el 7 de octubre, y luego será incluido en un box set de CD y DVD de Darkness on the Edge of Town, que saldrá a la venta en noviembre.
Por otro lado, uno de los films más esperados de esta edición de Toronto era Henry’s Crime, comedia romántica de Malcom Venville con Keanu Reeves, Vera Farmiga y James Caan. El protagonista es una suerte de hijo pródigo del lugar: Reeves pasó su adolescencia en Toronto y de hecho su casa y su colegio se encuentran cerca de los hoteles donde se hospedan las estrellas que asisten al TIFF.
El actor de The Matrix declaró: «me fui de Toronto en 1985. La primera vez que volví, siete años después, me fui a ver la calle en la que vivía, la calle Hazelton. Cuando vivía aquí el hotel Four Seasons no estaba construido así que me fui a caminar por esa calle. Pero desde entonces, no tengo ningún ritual» declaró el actor.
En el largometraje, Reeves interpreta a Henry, un gris cobrador de peajes en Buffalo (Nueva York), quien pasa tres años en prisión por un robo que no ha cometido. En la cárcel, comparte celda con Max (Caan) y los dos acuerdan robar un banco cuando salgan de allí. Un plan que están preparando para ejecutar hasta que el auto en el que viaja Reeves choca con el de Julie (Vera Farmiga), una actriz aficionada.
(Fuente: Latin News Blogspot)